La reacción de los distintos partidos políticos a una eventual cesión de los Altos del Golán no se ha hecho esperar. El diputado del Likud (derecha) Gideon Saar pidió hoy a Israel Beitenu y al Shas, dos de los partidos que conforman la coalición de gobierno, que la abandonen inmediatamente.
«Olmert no tiene ninguna legitimidad de la población para una retirada de los Altos del Golán y su administración es un peligro para la seguridad israelí», aseveró, subrayando que «la responsabilidad (de lo que ocurra) es de todos los miembros del gabinete».
Por su parte, el presidente de Unión Nacional, Zevulun Orlev, consideró que «Ehud Olmert vendería los Altos del Golán por su puesto, está intentando salvar su piel y su declaración sobre la retirada del Golán es un intento desesperado por sobrevivir».
Sin embargo, desde los partidos de izquierda se alabó la iniciativa de Olmert. El diputado de la Lista Arabe Unida- Ta’al, Ahmad Tibi, subrayó que «el precio para una paz viable con Siria es la plena retirada de los Altos del Golán». «Las negociaciones deben reanudarse inmediatamente», añadió. Por su parte, el líder del Meretz en el Parlamento, Zahava Gal-On, consideró que «para que Olmert demuestre que sus intenciones son serias, debe no hacer sólo declaraciones que creen una nueva agenda política, sino que debe iniciar un encuentro entre la ministra de Exteriores, Tzipi Livni, y su homólogo sirio, Walid al Muallem».