El acto contó con la presencia del Embajador del Estado de Israel, Rafael Eldad, dirigentes comunitarios y alumnos de la Red escolar.
Convocaron: Embajada del Estado de Israel – AMIA – DAIA – OSA – CUJA – Agencia Judía para Israel y FESERA.
Entre los asistentes se encontraba el Presidente de AMIA, Luis Grynwald y el de la DAIA Aldo Donzis.
Discurso que pronunció Luis Grynwald.
El calendario hebreo nos indica que el 5 del mes de Viar se celebra «Iom Haatzmaut» , la independencia del estado de Israel.
Medinat Israel; se viste de fiesta; y los judíos de todo el mundo festejamos con emoción la epopeya del joven Estado Judío.
Pero un día antes, es día de dolor. En cada ciudad de Israel, una gran pantalla, un candelabro, la palabra «Izkor» y la gente que en silencio espera el momento… la sirena como un shofar profundo, eterno, interminable… y entonces una canción, un poema y aparecen de golpe las imágenes de cada soldado caído, su nombre, su edad y el nombre de sus padres.
No se trata de un acto en recuerdo del soldado caído, del soldado desconocido, es la ceremonia donde se rinde homenaje a los hijos de cada ciudad que en las diversas guerras o enfrentamientos militares han ofrendado sus vidas por la medina. Es un acto de dolor y de amor.
Cuanto más atrás en el tiempo cayeron están presentes sus hijos o nietos.
a medida que nos acercamos a las ultimas contiendas encontramos a sus padres y hermanos.
Cuando algo deja de ser anónimo tiene un sentido distinto, el valor de la vida, el reconocimiento, el recuerdo. la imagen con nombre propio…
No son seres anónimos. Sus nombres quedaran siempre grabados en nuestra memoria, porque tal como dijo Jaim Weitzman, primer presidente de Medinat Israel
Ein medina nitenet leam al magash shel kesef.
Un Estado no le es concedido a un pueblo, en una bandeja de plata, y el estado de Israel no le fue entregado al pueblo judío en una bandeja de plata.
Su reconocimiento estuvo precedido por luchas ideológicas y armadas.
Atentados, dolor y sangre marcaron su independencia y sus jóvenes 59 años, pero el pueblo de Israel sigue anhelando la paz.
En el día de hoy, Medinat Israel y el pueblo judío todo, vuelve a poner una vez más el foco en el valor de la memoria como eje constitutivo del entramado central de una nación.
Iom Hazikarón no es la antesala de Iom Haatzmaut. es lo que le da a la independencia su valor más exacto: el de la vida misma.