La captura del cabo Guilad Shalit por guerrilleros ligados a Hamas en junio desató una convulsión de violencia que envolvió la Franja de Gaza durante cinco meses antes de entrar en vigencia una precaria tregua el domingo pasado. Israel y el presidente palestino Mahmud Abbas esperan que un intercambio de prisioneros pueda tener lugar durante la tregua y pueda llevar a las partes a la mesa de negociaciones.
Entretanto, el Departamento de Estado confirmó la reunión hoy entre la secretaria de Estado Condoleezza Rice y Abbas en la ciudad cisjordana de Jericó y agregó que viajará luego a Jerusalén para reunirse con el primer ministro israelí Ehud Olmert.
La visita de Rice sigue a una declaración de alto el fuego anunciada el fin de la semana pasada para poner fin a cinco meses de violencia. La tregua ha sido mayormente respetada. Los militares israelíes dijeron ayer que únicamente cuatro cohetes fueron lanzados desde Gaza desde que entró en vigencia la tregua el domingo, sin que causaran bajas.
Por su parte, Israel no ha realizado operaciones militares en Gaza.
La tregua es un elemento esencial en los intentos palestinos para reemplazar su gobierno actual con una coalición de unidad nacional. Esos intentos han quedado »estancados» debido a los desacuerdos entre Hamas y el Partido Fatá de Abbas en torno a la composición del nuevo gabinete, dijo ayer el secretario de la presidencia palestina Rafiq Husseini.
Tras reunirse con el director de los servicios de espionaje de Egipto, Omar Suleimán, que ha mediado el canje de prisioneros entre Israel y Hamas, Olmert dijo que está »muy satisfecho» con las negociaciones. Sin embargo, un funcionario israelí reconoció que los contactos no han adelantado la liberación del soldado del estado judío.
»Hasta ahora no hay acuerdo con los israelíes sobre el intercambio de prisioneros o el calendario», dijo Abu Mujahed, vocero de los Comités de Resistencia Palestina.
Hagshama