Hablando por primera vez en seis meses ante la sesión del parlamento palestino en la ciudad cisjordana de Ramala, Arafat destacó la necesidad de efectuar reformas políticas.
Arafat intenta buscar la reelección.
Sin embargo, agregó que los cambios sólo podrían hacerse cuando el ejército israelí se retire de los territorios palestinos.
Durante su alocución, Arafat condenó «todo acto de terror en contra de los civiles israelíes».
Arafat dijo que los palestinos «quieren paz y seguridad tanto para ellos como para los israelíes».
El líder palestino dijo que su pueblo tenía una postura firme «contra toda clase de terrorismo, ya sea cometido por estados, grupos o individuos».
La reunión se produjo en medio de las tensiones en la región que se han visto incrementadas con una nueva incursión del ejército israelí en la Franja de Gaza.
El gobierno de Israel impidió la presencia de los parlamentarios palestinos de la Franja de Gaza, porque, según dice, tienen vínculos con actividades terroristas.