Itongadol/AJN.- Pocos días antes de las Altas Fiestas judías, el rabino norteamericano Marc Schneier, presidente de la Fundación de Entendimiento Ético de Nueva York, hizo un balance de su trabajo a lo largo de este año y expresó sus preocupaciones para con el nuevo gobierno de Estados Unidos, en una entrevista exclusiva con la Agencia AJN.
En vísperas de las Altas Fiestas, ¿qué balance puede hacer sobre su trabajo y su año político en general?
Hubo un hecho que ilustra de alguna manera esta situación. Durante los últimos días de la guerra de Gaza, en el año 2014, dos soldados israelíes fueron asesinados por Hamás, Hadar Goldin y Oron Shaul. Desde entonces, sus respectivas familias han reclamado, sin suerte, los cuerpos para poder enterrarlos en Israel. Por eso en la Conferencia Israelí en Washington y ante la presencia de tres mil personas -incluyendo muchos líderes importantes de Israel- expresé mi preocupación en relación con este tema y pedí al líder de Hamás que devuelva los cuerpos de los soldados a sus padres para que puedan ser enterrados. Para mí es muy significativo que exista este nivel de cooperación entre los líderes musulmanes y la comunidad judía americana en representación de los soldados judíos. Creo que esto representa sumamente el trabajo que he llevado a cabo este año en relación con la comunidad musulmana. Además, pienso que internacionalmente es un maravilloso ejemplo de cómo se pudo llevar a cabo la cooperación entre los musulmanes y los judíos a nivel mundial.
En ese sentido, ¿cómo se promueve el diálogo interconfesional en un mundo con tantos conflictos?
Creo que lo que sucedió en la Conferencia Israelí ilustra un poco esta situación. Sin embargo, nuestros desafíos ya no son con la Iglesia. Gracias a Dios tenemos una muy buena relación con ella, ahora nuestros desafíos son con la comunidad islámica.
¿Considera que es difícil ser judío hoy en día?
No, para nada. De hecho creo que no ha habido mejor época en toda la historia para ser judío. A veces pareciera que olvidamos que por dos mil años fuimos perseguidos de continente en continente. Sólo basta con mirar hacia atrás dos mil años. Fueron años de represión, de persecución, desde la Inquisición al Holocausto. ¿Cómo puede alguien entonces sugerir que este no es un buen momento para ser judío? Por suerte tenemos al Estado de Israel que pelea por nosotros. Nuestra generación es muy bendecida en poder vivir en una época que ha devuelto la dignidad y el honor a los judíos por primera vez en dos mil años.
¿Cómo evalúa la presidencia de Obama? ¿Qué balance puede hacer de su gobierno?
Personalmente creo que es uno de los mejores presidentes de Estados Unidos, si se tiene en cuenta lo que hizo para restablecer la economía norteamericana. Con respecto a su relación con el mundo, Obama es un hombre de cooperación, no es una persona de conflicto, sino por el contrario, una persona que construye lazos con el resto del mundo.
¿Cuáles son sus expectativas para el nuevo gobierno de Estados Unidos?
Desde mi punto de vista, como judío, espero del próximo gobierno que continúe las dos grandes causas de la comunidad judía: combatir el antisemitismo y estrechar relaciones con Israel.
¿Cómo ve a los judíos en Latinoamérica? ¿Tiene alguna preocupación?
Algo que me preocupa particularmente de Argentina y Brasil es la creciente población musulmana. Creo que los líderes de la región no han sabido construir puentes con ellos. Creo que deberían empezar a unir fuerzas, cooperar.