AJN/Itongadol.- El Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel emitió una declaración criticando las afirmaciones de la Autoridad Palestina durante una audiencia de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en La Haya sobre la presencia israelí en la Margen Occidental por «crear una realidad fundamentalmente distorsionada», y descartando la audiencia como un «circo mediático» sin valor.
La Autoridad Palestina está “lanzando acusaciones falsas” en el juicio, dijo el ministerio, “tratando de convertir un conflicto que debería resolverse mediante negociaciones directas y sin imposiciones externas en un proceso legal unilateral e inadecuado diseñado para adoptar una narrativa extremista y distorsionada”.
El ministerio dijo que la masacre del 7 de octubre del año pasado fue «sorprendentemente» no mencionada en absoluto en la audiencia, y añadió que aquellos que les piden a las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) que se retiren completamente de todas las áreas de la Margen Occidental «sin condiciones y sin negociaciones, de hecho están pidiendo otra masacre de ciudadanos israelíes”.
Los dirigentes de la Autoridad Palestina (AP) han “rechazado durante años las negociaciones directas para resolver el conflicto”, dice la declaración del ministerio, “al tiempo que fomentan la incitación al terrorismo, promueven el antisemitismo y proporcionan incentivos financieros a los terroristas que asesinan a judíos”.
Añade que esas cuestiones le fueron “ocultadas al Tribunal” durante el interrogatorio.
La CIJ comenzó este lunes las audiencias sobre la solicitud de la Asamblea General de la ONU de una opinión consultiva sobre «las consecuencias jurídicas» del sostenimiento en el tiempo de las discusiones sin una solución definitiva sobre los «territorios en disputa».
La AP, que presionó para que la Asamblea General de la ONU solicitara la opinión consultiva, pretende que el tribunal dictamine que la presencia de Israel es ilegal.
Israel no acepta la jurisdicción del tribunal sobre esta cuestión y no envió una delegación a La Haya para presentar contraargumentos.
Dado que el procedimiento se deriva de una solicitud de opinión consultiva de la Asamblea General de las Naciones Unidas, cualquier decisión que emita la CIJ no será vinculante y tendrá poco efecto práctico sobre el terreno.