Itongadol.- El 09 de Av es la fecha de la destrucción de ambos Templos de Jerusalem y del comienzo del exilio del pueblo de Israel, del cual sufrimos aún hoy. El nivel de oscuridad y de tristeza de esta fecha es tan elevado que se deben tener en cuenta todas las restricciones correspondientes a este día.
Este año, el 9 de Av cae el sábado 10 de agosto de 2019. Siendo que Shabat es un día de alegría en el que está prohibido ayunar y hacer duelo, el ayuno es diferido al sábado a la noche y domingo.
Hay cinco cosas prohibidas en Tishá beAv:
1) comer y beber,
2) lavarse,
3) untarse el cuerpo con aceites,
4) calzar zapatos de cuero,
5) mantener relaciones íntimas.
En la víspera – sábado 10/8:
En Shabat, todas las exhibiciones públicas de duelo están estrictamente prohibidas. En este día comemos, bebemos y nos regocijamos como es costumbre, y aún más.
Hay dos excepciones: (a) Las relaciones matrimoniales están prohibidas en la tradición Ashkenazi (excepto si es la noche en que la mujer debe ir a la Mikve). (b) Está prohibido estudiar Torá comenzando desde Shabat al mediodía (excepto las secciones de la Torá que pueden estudiarse en Tisha BeAv). Por lo tanto, en este Shabat no recitamos un capítulo de Ética de los Padres (Pirkei Avot), como es costumbre en muchas comunidades en las tardes de Shabat entre Shavuot y Rosh Hashaná.
No se lleva a cabo una triste «comida de separación» – Seudat hamafseket- antes del ayuno, si no que poco antes del atardecer, participamos de una suntuosa y alegre comida pre-ayuno. Sin embargo, se debe tener cuidado de que esta comida termine antes del atardecer.
Nos sentamos en sillas de altura regular y usamos calzado normal hasta culminar el Shabat, al anochecer. Solo está prohibido lavarse, comer y beber a partir del atardecer.
Havdalá se recita el domingo por la noche. En algún momento del sábado por la noche (idealmente justo antes de la lectura de Eijá), se enciende la vela de Havdalá y se recita la bendición apropiada. (No recitamos la bendición de las especias).
Durante el 9 de Av- sábado a la noche y domingo:
Nos abstenemos de comer y beber. El ayuno comienza a las 18.19 del sábado 10 de agosto y termina a las 18.47 del domingo 11.
Todos están obligados a ayunar en Tishá beAv, incluso mujeres embarazadas y en período de lactancia. Sin embargo, un enfermo puede comer, aunque su enfermedad no ponga en peligro su vida, luego de consultar con una autoridad halájica. (En tal caso debe recitar la Havdalá antes de comer)
No nos bañamos.
No enjuagamos la boca hasta el final del ayuno.
Puede lavarse las manos si están sucias.
Se hace Netilat Iadaim solamente mojando los dedos, hasta los nudillos. Mientras estén húmedos, puede limpiarse los ojos con ellos.
No usamos calzado de cuero.
No se usa ropa fina o nueva ni se usan perfumes.
No usamos cremas o aceites, pero está permitido bañar a un bebé y untar lociones y aceites sobre su piel tal como se hace habitualmente.
No mantenemos relaciones conyugales.
No estudiamos Torá porque trae alegría. Sin embargo, ciertas secciones están permitidas:
El tercer capítulo del tratado Moéd Katán, que habla de las leyes del duelo y la excomulgación [sin profundizar en su análisis].
El comentario del Midrash sobre el Libro de Lamentaciones (Eijá), además de la interpretación de otros exégetas.
El Libro de Job (Iyov) con sus comentarios, pues, al igual que Lamentaciones, despierta un sentimiento de pena y dolor en el lector.
Los capítulos de admonición y tragedias registrados en Jeremías —salteando aquellos versículos que hablan de consuelo—.
Las agadot sobre la destrucción del Gran Templo que se encuentran registradas en el tratado talmúdico de Guitín.
Es costumbre sentarse en el piso o en un asiento bajo (menor a 24 cm) hasta el mediodía.
Durante la Tefilá de Minjá, a la tarde, se coloca los Tefilín (que no se colocaron a la mañana) y se recita el párrafo “Najem” en la Amidá.
No se debe saludar a un amigo, decirle “Buen día” o preguntarle cómo está. Sin embargo, si alguien nos saluda, debemos responderle para evitar que se moleste, pero en voz baja.
No se deben enviar regalos.
Se debe evitar caminar por la calle para no entrar en charlas banales y distraerse y evitar actividades que den felicidad.
No se prohíbe trabajar, pero se sugiere no hacerlo para no distraerse del duelo, por lo menos hasta el mediodía.
NOTA: En Argentina, que este día se llevarán a cabo las Elecciones Primarias (PASO), está permitido ir a votar, preferentemente después del mediodía.
Algunos evitan dormir en una cama sino que duermen en colchones colocados en el piso. De todas formas, se sugiere dormir con menos comodidad que lo habitual (por ejemplo, el que usa dos almohadas, que duerma con una sola).
Se acostumbra aumentar en caridad.
Según la tradición, el Mashíaj nació en Tishá beAv. Muchos acostumbran limpiar sus casas luego del mediodía, en anticipación a la redención que tanto esperamos.
Al día siguiente:
Muchas de las restricciones aplicables a los Nueve Días terminan cuando termina el ayuno, y se permite tomar el vino para Havdalá, escuchar música, bañarse y cortarse el pelo. Sin embargo, no comemos carne ni bebemos otro vino hasta la mañana siguiente. (lunes 12/8)
Consulte una autoridad Halájica para más detalles sobre este día.
Está escrito en el Talmud (Taanit 30b) que aquel que hace duelo por Jerusalem será meritorio de verla en su regocijo.
Que podamos verlo con la llegada del Mashiaj, amén!