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El espía israelí que tiene cadena perpetua en Estados Unidos se conmovió por la liberación del soldado liberado del cautiverio de Hamas y le dijo a su esposa: “También espero salir vivo de aquí”.
“La liberación de Gilad Shalit me da esperanza. Ojala salga de acá (la prisión) vivo”, dijo el espía israelí Jonathan Pollard, quien está cumpliendo una sentencia de cadena perpetua en Estados Unidos, a su esposa Esther.
Según un informe de hoy en Yedioth Ahronoth, el comentario fue hecho en una conversación telefónica entre los Pollard hace varios días.
Esther dijo que su esposo había rezado por la liberación de Shalit y que estaba conmovido por las noticias de que el intercambio de prisioneros entre Israel y Hamas haya sido exitoso.
“La liberación de Gilad Shalit nos da nueva esperanza sobre la liberación de Jonathan. Desde que Shalit volivó a Israel he recibido muchas cartas de personas de todo el mundo que expresan su esperanza de que se termine nuestra pesadilla”, expresó.
“La gente ha dicho que no puede creer que incluso en un momento del tiempo en el que las cosas con Hamas se están haciendo, incluso con el país más amigo de Israel, e incluso con el presidente Barack Obama quien cree en la justicia y en los derechos humanos, el tema siga abierto y no lo liberen”, destacó.
La esposa de Pollard mencionó que durante las últimas semanas su marido había estado sufriendo dolores severos y no pudo llegar al teléfono en un número de ocasiones. En distintos momentos los miembros del Congreso tuvieron que ser llamados para que intervinieran y le dieran analgésicos al hombre para aliviar su sufrimiento.
“Cuando escuché que el vicepresidente americano Joe Biden aceptó encontrarse con líderes judíos para discutir la liberación de Jonathan sentí, por un momento, que puedo ver que el final está cerca”, destacó.