No obstante, el científico judío, de 70 años, se mostró cauto por la curación de determinados tumores malignos como el de páncreas o el de colon, de gran incidencia en la población mundial
El doctor Avram Hershko, nacido en 1937 en Karkag (Hungría) pero de nacionalidad judía, forma parte del jurado de la modalidad de Nuevas Tecnologías de los Premios Rey Don Jaime I que mañana martes se fallarán en Valencia.
En declaraciones a EFE, Hershko explicó que su trabajo actual en Israel se centra en estudiar los mecanismos que provocan la degradación y la división de las células cancerígenas en las que las proteínas juegan un papel fundamental.
Comentó que «no es correcto hablar de una vacuna o medicamento que cure el cáncer, porque el cáncer no es una enfermedad sino muchas, y cada una de ellas es distinta y requiere un tratamiento específico».
En este sentido adelantó que ya se han desarrollado medicamentos para combatir algunos cánceres con buenos resultados, como el de médula.
El doctor Hershko indicó que «en la curación de las enfermedades cancerígenas es fundamental su detección temprana, porque se puede curar sin mucha dificultad».
Aseguró que, «como las espectativas de vida de la población mundial crece más, la incidencia del cáncer será cada vez mayor», y puso como ejemplo el cáncer de mama.
Sobre el mapa genómico, Avram Hershko comentó que no será «la panacea como muchos creen, pero si permitirá conocer que cáncer es mas susceptible de que aparezca en determinada persona, y de esta forma diagnosticarlo pronto y curarlo».
En relación con la situación de la investigación médica en España, se mostró «impresionado» sobre los avances que se están desarrollando en el ámbito de la oncología, «con grupos muy punteros que están a nivel mundial», aseguró.
Avram Hershko ganó el Premio Nobel de Química 2004, compartido con su compatriota Aaron Ciechanover y el estadounidense Irwin Rose, por sus estudios acerca de cómo las células producen proteínas.
Su carrera científica se inició en 1969 con el doctorado en Medicina en el Colegio Médico Hadassah de la Universidad Hebrea y a partir de 1972 trabajó con el doctor Gordon Tomkins en la Universidad de California, en San Francisco.
Entre sus premios cabe destacar el premio Weizmann de las Ciencias en 1987, el premio israelí en Bioquímica y Medicina, el premio internacional Gaidner otorgado por la fundación del mismo nombre y el premio Lasker por sus investigaciones médicas.