Itongadol/AJN.- El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, hizo llegar un mensaje a la Cumbre de la Liga Árabe, que se lleva a cabo en Mauritania. Allí, atacó con dureza a Israel, volvió a plantear la discusión histórica territorial y dijo que va a demandar a Gran Bretaña por la Declaración Balfour, del año 1917.
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, está buscando el apoyo de la Liga Árabe en la preparación de una demanda contra el gobierno británico debido a la Declaración Balfour. Se trata de una carta enviada en 1917 por el secretario de Relaciones Exteriores británico, Arthur James Balfour al Barón Rothschild y la Federación Sionista de Gran Bretaña. En la misiva, el gobierno británico expresa formalmente contempla en forma favorable “el establecimiento en Palestina de un hogar nacional para el pueblo judío y hará uso de sus mejores esfuerzos para facilitar la realización de este objetivo”.
En un discurso especialmente anti-israelí, que leyó en nombre de Abbas el canciller palestino Riyad al Maliki, el funcionario aseguró que “la Declaración Balfour es una declaración maldita, dada por alguien que no tiene nada que ver con el asunto a alguien que no lo merece”.
Mahmoud Abbas – que no pudo asistir a la reunión debido a la muerte de su hermano – expresó por intermedio de su representante que “la Declaración Balfour y su puesta en práctica provocaron la tragedia del pueblo palestino, y evitaron que pudiera vivir en su tierra”.
“En base a esta declaración, centenares de miles de judíos fueron trasladados desde Europa y otros lugares a Palestina, a costa de nuestro pueblo palestino. Ellos, sus padres y los padres de sus padres vivían en esa tierra desde hacía miles de años”, argumentó Abbas.
“Estamos trabajando para abrir el archivo de los crímenes israelíes contra nuestro pueblo desde el fin del Mandato Británico en Palestina, desde la masacre que cometieron en 1948 y todo lo que sucedió después”, agregó Mahmoud Abbas. A continuación, pidió a los países árabes que no normalicen las relaciones con Israel antes de que se establezca un estado palestino y se pronunció en contra de “lo que denominan cooperación regional y seguridad regional”.