Itongadol/AJN (Por Lic. Claudio Gustavo Goldman).- Diana Wassner, viuda de Andrés Malamud y secretaria de Memoria Activa, una de las agrupaciones que reúnen a familiares de víctimas del atentado a la AMIA, declaró hoy, jueves, por casi tres horas en el juicio oral y público por encubrimiento de sus autores o cómplices y criticó duramente al Estado Nacional, fundamentalmente al ex presidente Carlos Menem, el destituido juez Juan José Galeano y los entonces fiscales Eamon Mullen y José Barbaccia, y a la dirigencia judía encabezada por Rubén Beraja.
"Confiábamos en que las instituciones comunitarias nos representarían, pero no fue así, así que nos presentamos como querellantes para que no existiese la misma impunidad que en el atentado a la Embajada de Israel, del cual justo hoy, 17 de marzo, se cumplen 24 años", recordó.
"Galeano discriminaba a nuestros abogados y me dijo que fue a ver a Menem cuando volvió de Venezuela porque era una cuestión de Estado", enfatizó la testigo ante una Sala AMIA colmada como nunca antes en este juicio en el subsuelo y con una decena de personas adicionales en la planta baja, e incluso varias veces hubo aplausos del público, como cuando el presidente rotativo del Tribunal Oral Federal Nº 2, Néstor Costabel, impidió que la defensora de Beraja, Valeria Corbacho, le preguntara qué opinaba sobre el fallecido fiscal Alberto Nisman antes de la firma del memorándum con Irán.
También hizo hincapié en la presunta confianza existente entre la querella de la AMIA y la DAIA con el juzgado y el gobierno: "Galeano era \’Juancito\’ y Menem, \’Carlitos\’", además de una estrecha relación con el ex ministro del Interior Carlos Corach.
Malamud señaló a muchos otros dirigentes y funcionarios comunitarios que habrían estado en contacto permanente con los familiares, con la intención de "cooptarlos" para integrar una querella conjunta con las entidades centrales.
Por otra parte, sorprendió al revelar que la autopsia de su marido no correspondía al mismo, tanto por su grupo sanguíneo como por otras características que no se condecían con su edad (37 años), y que Beraja le pidió que no lo contara porque ello podía generar la exhumación de los cuerpos de las víctimas.
En una línea similar, la secretaria de Memoria Activa relató que hace seis meses la Fiscalía les pidió autorización para cotejar el ADN de los deudos con restos no identificados y aún no enterrados, especialmente el de uno de los fallecidos, que permanece como NN.
Al término de su testimonio se pasó a un cuarto intermedio hasta las 14 hs. para la declaración de Adriana Reisfeld, hermana de Noemí y presidenta de Memoria Activa.
Éstas son algunas de las declaraciones más esperadas del juicio porque esta agrupación de deudos descreyó desde un principio de la “versión oficial” del Estado y las instituciones comunitarias judías y desde entonces batalla, muchas veces en soledad, al punto de haber denunciado las irregularidades ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, impulsado y conseguido el juicio político y posterior destitución de Galeano, y también empujado y sostenido el reclamo para que se llevara a cabo el debate que hoy las tiene como protagonistas.
El tesorero de Memoria Activa, Jorge Lew, padre de Agustín, una de las 85 víctimas y viudo de Norma, sobreviviente y luego fallecida por las secuelas, declaró el 4 de febrero, tras el receso por la feria judicial.