Itongadol/AJN. – Bert Lahr nació el 13 de Agosto de 1895, hijo de una pareja judía alemana que emigró a los Estados Unidos. En 1969, el hijo del actor Bert Lahr, John Lahr publicó una biografía de su padre – Notas de un león cobarde- en la que contó la dura y triste infancia de su padre en el seno de una familia poco afectuosa y el doloroso estigma que sufrió el actor con el mismo papel que lo lanzó a la fama. “Quedé encasillado como un león y no hay muchos papeles para leones”, expresó el actor en el libro.
Años después del estreno de la película El Mago de Oz y con todo el éxito que trajo su papel, Lahr se quejó del resultado. “Fui encasillado como el león y no hay demasiados papeles en los que se interprete a un león”, citó su hijo John Lahr en la biografía que escribió para su padre, Notas de un león cobarde.
Irving Lahrheim, hijo de Jacobo y Augusta, una pareja de judíos alemanes que inmigraron a Nueva York, donde Jacobo era dueño de un taller de tapicería. A través del libro Notas de un león cobarde, John Lahr contó la triste infancia de su padre, porque no "era solo que su familia era desposeída sino que sus padres tampoco compensaban esa falta con amor".
Irving- quien se cambió su nombre cuando ingresó en el mundo del espectáculo- le contó a su hijo de aquella ocasión en que debían extirparle las amígdalas y su padre se negó a darle dinero para la cirugía. Entonces, con tan solo 11 años, se registró en el Hospital de Manhattan donde le hicieron la operación gratuitamente con rehabilitación ambulatoria.
Irving – o Bert – abandonó la escuela a los 15 años y comenzó a trabajar. Pasó por 14 empleos antes de darse cuenta que su futuro yacía en ese talento natural que tenía para hacer reír a las personas. A partir de ese descubrimiento, se unió a un grupo de Burlesque llamado los Siete Frolics y comenzó a recorrer regiones del país con el Circo de Columbia.
Gran parte de su trabajo se centró en el teatro. Su debut en Broadway fue en 1972 con el musical “Las revelaciones de Harry Delmar” y las interpretaciones de “Volando alto” (Flying High) y “Dubarry fue una dama” ("DuBarry Was a Lady"), tanto en teatro como en la pantalla.
En 1939 llegó el papel que marcaría toda su carrera como actor: el rol del león cobarde del mago de Oz. En el libro se reveló que los directores debieron repetir algunas escenas un par de veces para que Lahr se acostumbrara al papel. Además de que en más de una ocasión su sentido del humor distraía a los demás actores. Ese papel fue decisivo en su carrera, ya que, según contó su hijo en la biografía, su padre se quejó por tanto éxito: “Quedé encasillado como un león y no hay muchos papeles para leones”.
Bert Lahr falleció en 1967 por una fuerte neumonía.