Itongadol.- Este domingo, a partir de las 17, AMIA Cultura llevará adelante el tradicional festejo de Purim, una de las festividades más alegres del calendario judío. La cita es en Plaza Alemania, Avenida del Libertador y Scalabrini Ortiz, con entrada libre y gratuita y abierto a todo el público.
En esta edición, la programación incluye nuevas propuestas para disfrutar en familia y entre amigos. Juegos y talleres infantiles, desfile de disfraces, shows musicales de la mano de la orquesta “Kef” y “Papando Moscas”, espacios circenses y de fotos, son algunas de las alternativas que se proponen para celebrar lo que se conoce como “la Fiesta de las Suertes”.
Para las personas que viven lejos de Plaza Alemania, AMIA dispuso de un servicio de transporte que las trasladarán hacia el lugar. Los micros saldrán desde la sede de AMIA, a las 16:30 y a las 18, y desde Avenida Corrientes y Drago a las 16:15 y a las 17:15. Para solicitar lugar, se debe enviar un mail a [email protected]
LA HISTORIA DE PURIM
El festejo de Purim (palabra que significa “suerte” o “azar”) tiene su origen en el siglo 4 antes de la era común (a.e.c) y conmemora cómo los israelitas vencieron a la muerte bajo el Imperio Persa. Todo comenzó cuando el rey de Persia organizó un concurso de belleza para elegir a su nueva reina. Una joven judía de nombre Esther, quien no reveló su identidad, fue la favorecida. Mientras tanto, Hamán, Primer Ministro del Rey, dispuso la muerte de todos los judíos del reino porque su líder Mordejai se negó a arrodillarse ante él. Se echó la suerte para determinar el día en que se exterminarían a los judíos de Persia: a través de un sorteo, la fecha elegida fue el 13 del mes Adar.
Advertida sobre los planes de Hamán, Esther le pidió al Rey que asista con sus ministros a un banquete para honrar al monarca. Allí reveló que pertenecía al pueblo judío y dio a conocer el perverso plan de Hamán. Esther salvó así a su pueblo. De la tristeza surgió la celebración y con ella el origen de esta fiesta que recuerda cómo la suerte cambió el rumbo de los acontecimientos. Purim se celebra al día siguiente de su fracaso, es decir el 14 de Adar. A través de las generaciones, la festividad se transformó en un símbolo de la supervivencia judía.