«Hubo un tiempo en que el terrorismo, el fundamentalismo islámico y las ambiciones nucleares iraníes eran vistos sólo como problemas regionales -eran los problemas de Israel-«, declaró el ministro israelí de Exteriores, Silvan Shalom,
en un discurso ante la Asamblea General de Naciones Unidas.
«Hoy, la comunidad internacional constata que Irán, con sus misiles que pueden llegar a Londres, París, Berlín y el sur de Rusia, no amenaza únicamente la seguridad de Israel, sino la seguridad y la estabilidad del mundo entero», añadió.
«Irán reemplazó a Sadam Husein como primer exportador mundial del terrorismo, de odio e inestabilidad», dijo, al tiempo que denunció también el papel de Siria en materia de terrorismo.
El jefe de la diplomacia israelí declaró que esta Asamblea, que aprobó centenares de resoluciones que criticaban a Israel y que se reúne regularmente para hablar del conflicto palestino, haría mejor en dedicarse a otras tareas.