Pero la respuesta no habla de una intención oculta en los planes de Sharon, sino de una compleja realidad en el terreno, de la que Israel no logrará desprenderse, quizás tampoco después de haber abandonado la Franja de Gaza.
Sharon continúa con sus planes para salir de Gaza, los cuales ya han tomado un cariz bastante práctico, por ejemplo al concretarse un encuentro entre la cúpula policial y la militar, en relación a cómo coordinar entre ambas fuerzas la evacuación, quién hace qué, cómo ordenar todo en el terreno.
El tema de las compensaciones a los colonos que deberán retirarse va avanzando, así como otros aspectos prácticos de la retirada.
Pero para comprender la problemática y las contradicciones, ante todo, un corto resumen de los hechos.
– La semana pasada, dos suicidas del grupo integrista Hamas cometen un atentado en la ciudad sureña israelí de Beer Sheva, matando a 16 pasajeros civiles que viajaban en autobuses de línea e hiriendo a otro centenar de personas.
– Se esperaba un amplio operativo de respuesta en la ciudad cisjordana de Hebron, de la que habían salido los suicidas, pero éste no llegó, sino que desde el atentado hubo varias detenciones en esa zona, sin entrada masiva de tropas.
– Días después del ataque en Beer Sheva, quedó claro que Israel está decidido a seguir persiguiendo a Hamas, entre otros sitios, con mucho énfasis, también en Gaza. Quince palestinos, miembros del brazo armado de la organización, mueren en un ataque aéreo israelí, mientras se entrenaban por la noche. Varias decenas – entre ellos algunos civiles – resultaron heridas.
– Los palestinos prometen venganza. El primer ministro palestino, Ahmed Qurei, dice que «habrá represalias y si llegan, estarán justificadas». No exhorta a ella, pero da a entender que será inevitable. Israel le critica señalando que está justificando de antemano atentados contra civiles.
– Las primeras reacciones palestinas se traducen en disparos de numerosos cohetes Qassam desde Gaza, no sólo a los asentamientos israelíes en la zona, sino también a territorio soberano de Israel, tanto la ciudad de Sderot como otras localidades. Hay algunos heridos, pero todos hablan de «milagro» porque gran parte de los cohetes cae en campo abierto.
– El ejército israelí vuelve a entrar al norte de Gaza, con la declarada intención de frenar los cohetes, pero éstos siguen aterrizando en Israel.
Fte BBC.-