Itongadol.- “Somos una comunidad étnica de origen austro-alemán, pero hoy en día nos estamos transformando en una kehilá y tenemos que ser amplios porque entró gente descendiente de polacos, rusos y sefaradim”, explicó el presidente de Benei Tikvá, Raúl Bergmann, a la Agencia Judía de Noticias (AJN).
En los próximos Iamim Noraím, además del servicio según “el rito Lewandowski, con cantos tradicionales como eran en Polonia y Alemania”, a cargo del rabino Abraham Skorka en la sede de Vidal 2049 habrá otro, denominado “Ierushalaim”, en Las Cañitas, que será “mucho más moderno y ágil”, con “más gente joven y de la zona, sobre todo padres de chicos que vienen a nuestra institución”, anticipó.
Este será una continuidad del servicio que durante mucho tiempo se realizó en un salón de la avenida Crámer y “es un desafío que lleva adelante el nuevo y joven rabino, (Marcos) Perelmutter”, agregó el ex tesorero, que comanda la institución hace menos de un año.
“Tenemos casi todo vendido en ambos lugares”, se enorgulleció en referencia a los sitiales para las Altas Fiestas.
Bergmann aseguró que Benei Tikvá goza de un prestigio “enorme desde sus comienzos, con uno de los mejores rabinos conservadores” de esa época y que los servicios religiosos semanales se realizan “los jueves a la mañana, tefilín; el viernes, el Kabalat Shabat; y el sábado, a la mañana y a la tarde, Minjá”.
Por otra parte, la situación económico-financiera de la institución “en gran parte se está saneando” gracias al alquiler del predio de Crámer a un maximercado, “lo cual representa un ingreso importante que antes no teníamos”, finalizó.