Asimismo, una adolescente libanesa falleció por una bala perdida cuando se encontraba fuera del campamento. Mariam Qoteiche, de 14 años, estaba en el balcón de un hospital de las afueras de Saida, principal ciudad de Líbano sur, donde visitaba a un allegado, cuando resultó herida de una bala que terminó con su vida.
Al conocer la muerte del oficial, apodado Abul Haija, sus partidarios lanzaron al aire ráfagas de ametralladora y cohetes antitanque, creciendo así la tensión que ya se vive de por sí en este campamento, el mayor del Líbano con unos 70.000 refugiados, según constató un corresponsal de la AFP.
La manifestación fue organizada por Al Fatá, grupo del presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) Yasir Arafat, en señal de apoyo a los detenidos palestinos en las prisiones israelíes, que cumplen una huelga de hambre desde hace más de dos semanas.
Un oficial de Al Fatá indicó a la AFP que disparos de armas automáticas alcanzaron una dependencia de su movimiento en el centro del campamento, en un momento en que la manifestación llegaba a su altura.
Dos personas, ligeramente heridas fueron trasladadas al hospital A Qods, dentro del campamento, y otros cinco fueron evacuados al hospital Hamchari, según fuentes de ambos centros. Después de ser inmediatamente dispersados, los manifestantes se reagruparon de nuevo y retomaron su marcha hacia el campamento.