El Gobierno de Estados Unidos transmitió su escepticismo sobre la posibilidad de que el reciente memorándum de entendimiento que la Argentina firmó con Irán en relación al atentado a la AMIA vaya a arrojar algún resultado que permita el esclarecimiento del brutal ataque terrorista perpetrado el 18 de julio de 1994 en Buenos Aires.
Al menos así lo aseguró la secretaria de Estado adjunta de EE.UU. para Asuntos del Hemisferio Occidental, Roberta Jacobson, en una entrevista realizada por el periodista Andrés Oppenheimer.
De acuerdo a lo sostenido por Oppenheimer en una columna de opinión publicada por el diario The Miami Herald, Jacobson se manifestó "escéptica de que la solución (de la causa por el atentado a la AMIA) sólo pueda encontrarse" a través de la denominada Comisión de la Verdad creada a partir de este acuerdo entre la Argentina e Irán.
Consultada sobre si ve a la Argentina como totalmente alineada con Irán, como lo están Cuba y Venezuela, Jacobson respondió: "Yo no haría ese salto todavía. Espero que no. Espero que podamos a seguir trabajando con los argentinos en un montón de problemas mundiales, incluidos los esfuerzos de lucha contra el terrorismo".
Por su parte, el periodista consideró que “la Argentina ha pasado de la raya al hacer un buen trato con Irán para investigar conjuntamente el ataque terrorista contra la sede de la AMIA de 1994, que según los fiscales argentinos y la Interpol fue ideado por altos funcionarios iraníes”.
“El acuerdo parece poner a la Argentina completamente dentro del club venezolano liderado por los países latinoamericanos que apoyan algunos de los peores delincuentes humanos en el mundo los derechos humanos”, agregó Oppenheimer.
En su columna, el periodista señaló que “el fallecido presidente Néstor Kirchner había apoyado las peticiones judiciales argentinas para la extradición del ex presidente iraní Ali Akbar Hashemi Rafsanjani, el actual ministro de Defensa iraní Ahmad Vahidi y otros en relación con el atentado con coche bomba que dejó 85 muertos y unos 300 heridos hace 19 años”.
“Pero ahora, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner parece haber cambiado de rumbo, rompiendo el mayor stand de la política exterior que diferenciaba a la Argentina de Venezuela y Cuba”, agregó.
Oppenheimer también estimó que “Fernández ha decidido lanzar su suerte con Irán, Venezuela y sus aliados”. “Las exportaciones argentinas a Irán se han triplicado de 319 millones de dólares a 1.100 millones en los últimos cinco años”, añadió.
No obstante, el periodista admitió que para la mayoría de los economistas Irán no hace una gran diferencia en la economía de la Argentina.
Por eso, Oppenheimer estimó que la Presidenta “está actuando bajo la influencia de su amigo, el presidente venezolano Hugo Chávez”.
Aunque una tercera opción para el periodista sería que el Gobierno argentino entienda sinceramente que “puede desenredar la investigación AMIA con la cooperación de Irán”.
“Espero estar equivocado acerca de esto, pero el resultado final de esta llamada Comisión de la Verdad de Argentina e Irán determinará que un puñado de funcionarios iraníes de bajo nivel estuvieron involucrados en el caso, lo cual permite que el régimen de Irán afirme que no tenía nada que ver con eso, y Argentina dará por resuelto el caso. Eso supondría un duro golpe a la justicia, y un insulto a la memoria de los 85 judíos y no judíos que murieron en el ataque terrorista”, concluyó el columnista.