Los dos potenciales kamikazes, cuyas identidades no fueron precisadas, pretendían accionar simultáneamente sus bombas en la ciudad de Rosh Ayin, al noreste de Tel Aviv, aunque fueron detenidos en la localidad de Rafat, en Cisjordania.
La televisión pública israelí precisó que la operación fue llevada a cabo conjuntamente por el Shin Beth (el servicio de seguridad interior) y el Ejército israelí.
Por otro lado, fuentes militares afirmaron que el Ejército israelí detuvo en Jenín, Cisjordania, al principal dirigente de un atentado que ayer asesinó con un arma automática a un colono israelí que circulaba al norte de la región. Este ataque fue reivindicado por las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa, un grupo armado ligado al grupo Al Fatá del dirigente palestino Yasir Arafat.