“Ojalá hubiese hecho explotar la Knesset (parlamento israelí), la Corte Suprema y varias bases de la Fuerza de Defensa de Israel”, expresó Elhanan Esterovitch, el principal sospechoso del vandalismo en el Museo del Holocausto Yad Vashem, a los investigadores durante sus interrogaciones.
Esterovitch, de 31 años, es un residente ultraortdoxo de Jerusalem y fue procesado hoy. Está acusado de allanamiento, vandalismo, daño a la propiedad pública y ofensas contra la bandera.
La policía le pidió a la corte que lo mantenga detenido hasta la conclusión de sus procedimientos legales contra él. Otros tres sospechosos del caso fueron puestos en prisión preventiva en sus hogares.
El caso reconstruido por la policía alega que el 11 de junio Esterovitch profanó la entrada principal del Yad Vashem y escribió en aerosol las leyendas “Hitler gracias por el Holocausto”, “Si Hitler no hubiese existido los sionistas hubiesen tenido que inventarlo”, “Israel es el Auschwitz secular del judaísmo sefardí” y “Judíos despierten – el régimen sionista es peligroso”. También se encontraron pintadas en el piso del hall principal del museo y en algunos relieves de bronce en las paredes.
La policía cree que Esterovitch se asustó cuando oyó el sonido de un auto que se dirigía a la entrada y abandonó la escena. También entienden que está vinculado al vandalismo del sitio de memoria de la Montaña de Municiones en abril.
El abogado defensor Yair Nehorai dijo: “No creo que ofender al público, por más grave que pueda parecer, sea motivo de prisión preventiva”.
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