Pedhazur participa hoy en las I Jornadas Internacionales sobre Terrorismo de la Fundación Manuel Giménez Abad, que se celebran en Zaragoza, en el Palacio de La Aljafería, sede de las Cortes de Aragón.
El profesor de la Universidad de Haifa se lamentó de que «la política de seguridad de Israel se centra en el suicida y no en la organización» y criticó los asesinatos selectivos, «no sólo por motivos morales obvios, sino también por estrategia, por el odio que despiertan».
Como ejemplo de su propuesta de capturar a los líderes, Pedhazur mencionó la detención, juicio y condena a muerte del líder del PKK del Kurdistán, condena que motivó la oferta de tregua por parte de la guerrilla kurda. «Quizá sea más interesante ofrecer un incentivo a las organizaciones terroristas para que dejen de realizar ataques» suicidas.
Entre las causas de la aparición del terrorismo suicida, el experto en Ciencia Política dijo que «hay un decisión racional, porque saben que se enfrentan a un enemigo más fuerte y buscan nuevas formas de atacar, y funciona, tienen capacidad para causar daño».
En ocasiones hay organizaciones que «simplemente buscan adaptarse a las circunstancias para sobrevivir, como se vio cuando Arafat permitió que Al Fatah entrara en este tipo de acciones. Él pensaba que estaba perdiendo la batalla dentro de las organizaciones palestinas respecto a Hamás y la Yihad. Cuando Al Fatah comenzó los ataques suicidas su popularidad creció considerablemente».
Ami Pedhazur explicó que los terroristas suicidas «son un arma, un instrumento» en manos de los dirigentes, «no son más que herramientas de las elites terroristas, no es un tipo especial de terrorismo».
Tras resaltar que «el terrorismo suicida no procede del Islam», sino que «las organizaciones que lo alientan tienen unos objetivos a un plazo mucho más corto y no están especialmente interesadas en el Islam», Pedhazur comentó que los suicidas tienen un entrenamiento militar y, posteriormente, «un entrenamiento mental» en el que «se les inculca que la vida no tiene tanto valor y que no es correcto hablar de suicidio porque la muerte es la puerta a una vida mejor», hecho que «no sólo se observa en organizaciones islámicas, sino que el IRA también lo hizo a través de huelgas de hambre».
En la jornada de hoy también participa el periodista Marcos García Rey, experto en el mundo árabe y colaborador de diversos medios de países musulmanes.
García Rey señaló que «quedan muchos puntos por aclarar» tras los atentados del 11-M y opinó que pasarán cuatro o cinco años hasta que se resuelva el asunto por completo. El periodista comentó que «para entender el movimiento islamista son fundamentales Egipto, Marruecos y Pakistán».
Al respecto expresó que «Egipto ha sido la cuna del islamismo, no sólo del radical sino del moderado», mientras que «el islamismo en Marruecos nos afecta muy de cerca, no es casualidad que en los últimos grandes atentados hayan participado muyahidines marroquíes».
«No veo movimientos terroristas endógenos en estos países, sino que son producto del Yihad internacional, que lidera Al Qaeda», comentó García Rey, quien aclaró que «los árabes hablan de varias Al Qaedas».
Fte E.Press