El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, decidió hoy, martes, corregir las previsiones de déficit presupuestario para 2013 del Ministerio de Hacienda y duplicarlo hasta el 3 por ciento del producto bruto interno, en lugar de aplicar nuevos aumentos de impuestos.
Hace dos años, el gobierno había anticipado un déficit de 1,5 por ciento y altos funcionarios del Tesoro habrían estado impulsando un alza al 2,5 por ciento, además de un incremento en la carag impositiva, pero el titular del Ejecutivo anunció que el primero alcanzaría casi los 30 mil millones de shekels.
Además, Netanyahu y el ministro de Finanzas, Yuval Steinitz (ambos en la foto), acordaron bajar el déficit al 2 por ciento en 2016 y 1,5 en 2019, para mantener el objetivo original de reducir la relación deuda-PBI a un 60 por ciento en 2020.
Este mes, el Tesoro admitió un déficit presupuestario de 18.400 millones de shekels desde comienzos de año, que adjudicó principalmente a la caída de 11.300 millones en la recaudación impositiva, que se espera que siga en declive en 2013.
Steinitz resaltó que el nuevo objetivo del 3 por ciento de déficit aún era menor que el de la mayoría de los países occidentales y agregó que en las próximas semanas propondría las medidas necesarias para cumplir con ese objetivo.
Por su parte, Netanyahu se comprometió a mantener “los importantes programas nacionales”, con como el bloqueo a la entrada de inmigrantes ilegales africanos y la educación gratuita para los niños pequeños.
347