El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, confirmó hoy domingo a los ministros de su partido Likud que no iba a asistir a una reunión para tratar el presupuesto destinado a la defensa convocada por el miembro de la Knesset, Shaul Mofaz (Kadima), quien encabeza la Comisión de Asuntos Exteriores y de Defensa.
La reunión, programada para mañana lunes, tiene como objetivo analizar la reducción del presupuesto de defensa.
Netanyahu, quien debía asistir a la reunión junto con los ministros de Defensa, Ehud Barak, y de Finanzas, Yuval Steinitz, justificó su decisión al insinuar que Mofaz estaba usando el comité para mejorar su posición en la carrera con Tzipi Livni por la presidencia del partido Kadima.
"Yo respeto los procesos democráticos dentro de las diversas partes, pero no voy a dejar que la Oficina del Primer Ministro o las otras oficinas de gobierno sirvan como telón de fondo para las primarias de Kadima", sostuvo el premier israelí.
En tanto, Steinitz se quejó porque se puso en marcha una "campaña de terror sin precedentes" para evitar los recortes presupuestarios en el área de defensa.
El Ejército israelí ya advirtió de los riesgos que implican recortes en capacitación y equipamiento.
Incluso, las autoridades militares ya anunciaron la suspensión de la compra de arsenal para la denominada Cúpula de Hierro como consecuencia de los "recortes presupuestarios".
Según el diario Yedioth Ahronoth, el Director General del Ministerio de Defensa, Udi Shani informó que el ejército israelí no va a comprar más baterías para la Cúpula de Hierro.
"En un país democrático, el gobierno decida y el Ejército saluda. La campaña del establishment de la defensa tiene algunas características anti-democráticas. Esto no es más que un intento de chantaje destinado a recibir más fondos a expensas de la educación y el bienestar", sostuvo Steinitz para defender los recortes.
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