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Se tomaron pasos hacia adelante significativos hoy en las conversaciones entre el Ministerio de Finanzas y la Federación de Empleo Histadrut para terminar con la huelga general de Israel.
Según el acuerdo bajo discusión, unos pocos miles de 300.000 trabajadores tercerizados se convertirán en empleados estatales, cuyos salarios y beneficios sociales mejorarán significativamente. Estas posiciones serán ofrecidas a través de licitaciones del contador general del Ministro de Finanzas.
En paralelo, el número de inspectores que deben supervisar las condiciones de empleo de los trabajadores tercerizados aumentará a cien.
Representantes de las partes están actualmente trabajando sobre las palabras finales del acuerdo, y se espera que haya una conferencia de prensa más tarde hoy.
Las conversaciones comenzaron anoche en la oficina del presidente de la Corte de Trabajo Nacional de Israel, Nili Arad; con el ministro de finanzas del país, Yuval Steinitz; el jefe de Histadrut, Ofer Eini; y el jefe de la asociación de manufacturas de Israel, pero no pudieron alcanzar un acuerdo incluso después de dos extensiones de la fecha límite original a la una de la mañana para tener un resultado del encuentro.
Histadrut demandó que el estado contrate a trabajadores tercerizados directamente, especialmente a los empleados de limpieza. Aquellos que no sean contratados de este modo recibirán los mismos ingresos, beneficios y términos que los empleados regulares que hacen el mismo trabajo, según insistió la federación laboral.
El Ministerio de Finanzas rechazó las demandas y dijo que estaba dispuesto a aumentar los salarios de los trabajadores tercerizados en un 20 o 25% y asegurarse que se mantienen sus derechos.