Al hablar ante el Consejo de Relaciones Exteriores, Clinton consideró que los “pesimistas” se equivocaron al pensar que las conversaciones estaban condenadas al fracaso.
La funcionaria afirmó que es posible lograr la paz si las partes superan "los obstáculos iniciales", en una clara alusión a la controversia generada por la congelación de las construcciones en las colonias judías, que finalizará el próximo 26 de septiembre.
Los palestinos ya amenazaron con abandonar la mesa de negociaciones si Israel reanudará sus actividades en los asentamientos, según consignó el portal de noticias Ynet.
Clinton señaló que “los líderes de ambas partes reconocen que nunca podrán tener otra oportunidad" para lograr la paz.
Durante su discurso, Clinton dijo que la administración de Barack Obama considera que el desarrollo de la región es "un imperativo estratégico, económico y moral" y es un elemento tan clave para el avance de los intereses estadounidenses en el mundo como lo son "la diplomacia y la defensa".
La encargada de la diplomacia de Estados Unidos explicó que su país "invierte centenares de millones de dólares" para fortalecer la capacidad palestina, porque "el progreso sobre el terreno mejora la seguridad y ayuda a sentar los cimientos para un futuro Estado palestino, y crea condiciones más favorables para las negociaciones".
"La confianza que ha demostrado la nueva fuerza de seguridad palestina ha afectado los cálculos del liderazgo israelí. Estados Unidos estuvo detrás de la formación de esa fuerza de seguridad, junto con otros socios como Jordania", puntualizó Clinton.
Respecto de la figura del presidente palestino Mahmoud Abbas, Clinton dijo que "fue probablemente el primero y, a veces el único líder palestino que abogó por una solución de dos estados, que se remonta, probablemente a 20 ó 30 años. Y para él esto es la culminación de una vida de compromiso”.
GB
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