El boicot comenzó más de un año atrás, dada la tensión que rodeaba la operación militar israelí en Gaza. Pero desde el comienzo de 2010, el número de israelíes que vacacionaron en Turquía aumentó en un 18 por ciento.
El hecho de prestar ayuda a la flotilla de asistencia y los informes de que el partido gobernante islamista de Turquía está cooperando con Hamas en su organización generan que el boicot cobre nueva importancia para las organizaciones que nuclean trabajadores en Israel.
El CEO de Vaadim, que reúne información sobre membrecía, actividades y beneficios de los sindicatos, expresó que hoy la empresa comenzará a examinar la posibilidad de reiniciar oficialmente el boicot.
El Primer Banco Internacional de Israel ya lo decidió. “La flotilla hacia Gaza ha logrado que replanteemos el envío de empleados a Turquía”, expresó el presidente de su sindicato, a la vez que apuntó que 600 ejecutivos del Banco estarían por vacacionar en Creta, a pesar del mayor gasto que representa a comparación con Turquía.
GL