"Hemos transmitido nuestras quejas a las autoridades israelíes", explicó hoy a Efe el portavoz de la Embajada estadounidense en Tel Aviv, Kurt Hoyer.
El Departamento de Estado de EEUU, añadió el portavoz, ha comunicado a Israel que espera que "todos los ciudadanos estadounidenses sean tratados por igual, más allá de cual sea su origen nacional".
La portavoz de ese departamento, Ian Kelly, señaló ayer que las nuevas restricciones israelíes "son inaceptables" y que su Gobierno "continuará protestando".
La queja tiene lugar después de que las autoridades fronterizas israelíes comenzaran hace unos meses a utilizar un nuevo tipo de visado que limita el paso de los viajeros a sólo los territorios controlados por la Autoridad Nacional Palestina (ANP), es decir, a parte de Cisjordania.
El nuevo visado restringido se entrega a quienes indiquen en la frontera que tienen vínculos con Cisjordania o que piensan viajar a ese territorio y sustituye al visado habitual que permite el acceso a todo Israel y los territorios palestinos (a excepción de Gaza, que sufre un férreo bloqueo desde hace dos años).
Además, según la Embajada estadounidense en Tel Aviv, a muchas personas con doble nacionalidad, una de ellas palestina, no se les está permitiendo la entrada a Israel a su llegada al aeropuerto de Ben Gurión (cerca de Tel Aviv), donde se les informa que deben acceder a través del cruce fronterizo con Jordania de Allenby-King Husein.
"En algunos casos las familias han tenido que viajar separadamente a Estados Unidos y algunos viajeros han tenido que costearse billetes caros", explica la Embajada norteamericana.
"Todavía no hemos recibido respuesta de las autoridades israelíes, que esperamos llegue en los próximos días", dijo Hoyer.