La comunidad judía de Colombia espera con importantes expectativas la llegada del canciller israelí Avigdor Lieberman, quien el próximo 28 de julio arribará a Bogotá para iniciar una visita de un poco más de dos días como parte de una gira que el funcionario realizará por la región.
En declaraciones a la Agencia Judía de Noticias (AJN), el presidente de la Comunidad Israelita de Bogotá, Marcos Peckel, respaldó la llegada del ministro israelí como parte del proceso de fortalecimiento de las relaciones del Estado hebreo con los países sudamericanos.
“En Colombia tenemos una situación muy sui generi con Israel. Hay una opinión pública favorable a Israel, incluso durante la guerra de Gaza (de enero pasado)”, destacó el dirigente comunitario.
Peckel comentó que Colombia mantiene con Israel “profundas relaciones en el campo militar y científico y por lo tanto, fuera de algunos medios que son un poco sesgados, la relación es muy buena”.
“El canciller tiene previsto llegar el 28 de julio y en términos de reuniones políticas, la agenda corresponde a la embajada”, indicó.
Siempre en diálogo con esta agencia, Peckel comentó que el ministro Lieberman mantendrá solo un encuentro con miembro de la comunidad judía debido a la apretada agenda del ministro.
El encuentro será el 28 a la noche, cuando el canciller será recibido con un cocktail “en la sede de Hebraica, donde van a estar invitados diplomáticos, funcionarios del gobierno y gente de la comunidad”.
La visita de Lieberman es bien recibida en Colombia más allá de la polémica que pueden generar las declaraciones del ministro israelí.
“Estamos apoyando a cualquier ministro de Relaciones Exteriores de Israel”, comentó Peckel para destacar el respaldo de esa comunidad hacia el Estado hebreo.
Lieberman tiene previsto visitar Argentina durante la segunda quincena de julio, también pasará por Brasil, el próximo 21 y 22 de julio, y completará su gira con una visita a Perú.
La llegada del canciller israelí se produjo en momentos que Irán intenta afianzar su vínculo con los países de la región a partir de la relación que el presidente islámico Mahmoud Ahmadinejad mantiene con Venezuela, Bolivia, Ecuador y Nicaragua.
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