Durante el rezo del Angelus, el Papa alemán aseguró que experimenta "aún dolor" cuando recuerda este episodio y abogó para que "estos horrores no se vuelvan a repetir".
Para ello, instó al empeño "a todos los niveles contra cualquier forma de antisemitismo y discriminación", comenzando por enseñar, "sobre todo a las nuevas generaciones al respeto recíproco y la acogida".
"En la noche del 8 al 9 de noviembre se vivió la furia nazi contra los judíos, cuando asaltaron negocios, casas y sinagogas y se asesinaron a muchos de ellos, dando inicio a la sistemática y violenta persecución de los judíos alemanas que concluyó con el Holocausto", recordó hoy el Papa durante el rezo del Angelus.
Tras su llamamiento, el Papa invitó "a rezar por aquellas víctimas" y mostró su "profunda solidaridad" a todo el pueblo judío.
El 9 de noviembre de 1938 miles de comercios, sinagogas, cementerios y hogares de ciudadanos judíos fueron destrozados en Austria y Alemania durante la noche que fue recordada como la ‘Kristallnacht’ (Noche de los Cristales Rotos), en referencia a los miles de viviendas y establecimientos que sufrieron la rotura de sus escaparates y ventanas.