El movimiento ha lanzado una campaña bajo el lema de ‘Hablar con Siria ahora’ con la intención de alentar al primer ministro israelí, Ehud Olmert, a que negocie la paz con el presidente sirio, Bachar al Asad.
Para ello, banderas de ambos países fueron colgadas desde el cruce de Shaar Hagay, a unos 20 kilómetros de Jerusalén, hasta el Parlamento, en Jerusalén.
Se trata del mismo trayecto que debe hacer cualquier dirigente extranjero para llegar a Jerusalén, y en el que, según el protocolo diplomático, se cuelgan las banderas nacionales de jefes de Estado y de gobierno que están de visita en Israel.
‘El Gobierno (israelí) tiene la obligación de evitar la próxima guerra y tratar de llegar a un acuerdo de paz con Siria’, dijo el secretario general de Paz Ahora, Yariv Oppenheimer.
Según Oppenheimer, ‘en los últimos meses Siria está dando señales de que quiere negociar’.
Israel lleva más de seis meses analizando si los mensajes de paz de Damasco son genuinos o si, por el contrario, la intención de Al Asad es desviar la atención internacional de los acontecimientos en el Líbano y de las acusaciones contra él y sus servicios secretos de atentar contra políticos libaneses, entre ellos el ex primer ministro Rafic Hariri, en 2005.
Ayer, en unas declaraciones a la televisión Al Arabiya, Olmert invitó a Al Asad a visitar Jerusalén ‘para hablar’.
‘Bachar al Asad, ¿sabes?. Sabes que estoy dispuesto a mantener negociaciones directas contigo y también sabes que eres tú quien insiste en hablar a los americanos’, afirmaba el jefe del Gobierno israelí en la entrevista.
Y proseguía: ‘El presidente americano dice: ‘No quiero estar entre Bachar al Asad y Ehud Olmert’. Si quieres hablar, sentémonos y hablemos’.
Se refería a las acusaciones de distintos grupos pacifistas israelíes de que Washington está bloqueando cualquier iniciativa de paz entre Israel y Siria, a fin de no permitir que Al Asad -que forma parte del ‘eje del mal’ del presidente George W. Bush- escape del banquillo de los acusados por el asesinato de Hariri.
Ante estas acusaciones, durante una reciente comparecencia ante los medios en Washington con Olmert, el presidente estadounidense aseveró que el primer ministro israelí era ‘absolutamente capaz’ para alcanzar un acuerdo de paz con Damasco sin la ayuda de EEUU.
Israel asume que en cualquier acuerdo de paz con Siria deberá devolver la meseta, pero en la última ronda de negociaciones, de 1999, las partes no consiguieron ponerse de acuerdo sobre el lugar exacto por el que pasaría la frontera ni sobre las garantías mutuas de seguridad.
Entretanto y mientras se aclara si hay o no posibilidad de diálogo, la Inteligencia Militar israelí asegura que Siria se está preparando para una guerra inminente y los altos mandos israelíes han ordenado este mes una serie de maniobras en el Golán para entrenar a sus hombres.