Los dos líderes mantuvieron un encuentro en la localidad costera egipcia del Mar Rojo de Sharm el Sheij, su primera reunión desde que los islamistas de Hamás derrotaron a las fuerzas seculares de Abas en Gaza este mes.
Olmert dijo en una conferencia de prensa junto a líderes palestinos, egipcios y jordanos que trabajaría con «moderados» como Hamás contra los «terroristas» – en clara referencia a los miembros de Hamás – para asegurar la paz en Oriente Próximo.
«Como un gesto de buena voluntad hacia los palestinos, hoy anuncio mi intención de liberar aproximadamente a 250 prisioneros que son miembros de Al Fatah, que no tienen sangre en sus manos, con el compromiso de que no se vuelvan a involucrar en terrorismo», dijo Olmert en una conferencia de prensa.
«Soy optimista porque, especialmente en estos días turbulentos (…) se ha creado una oportunidad para avanzar seriamente con el proceso regional de paz», dijo. «No planeo dejar pasar esta oportunidad».
Hamás ha acusado de Abas de ceder al «chantaje sionista».
Horas antes, los extremistas de Hamás en Gaza difundieron una cinta con la voz del soldado israelí secuestrado hace un año Gilad Shalit. Un portavoz del grupo dijo que dependía de Israel llegar a un acuerdo para liberar a Shalit, de 20 años.
La difusión de la cinta mostró los obstáculos que hay para un acuerdo con 1,5 millones de palestinos, una tercera parte de los ciudadanos potenciales del nuevo estado, que ahora viven bajo el mandato de Hamás.
«El único beneficiario de estos encuentros es el enemigo sionista», dijo Mushir al Masri, miembro de la mayoría de Hamás en el ahora moribundo parlamento palestino.
«Es sorprendente que en un momento en el que Abas ha cerrado la puerta a conversaciones con Hamás vaya corriendo y mendigando una reunión con Olmert».