El próximo 31 de octubre, la Convención designará a su presidente, lo que constituirá una primera prueba de popularidad entre Ariel Sharon y Benjamín Netanyahu.
Ambos presentaron candidatos a ese puesto. El de Sharon es el alcalde de Jerusalén, Ehud Olmert, y el de Netanyahu es el diputado Yisrael Katz, representante del sector de extrema derecha del partido.
El primer ministro aventaja a su rival en los índices de popularidad en Israel, ya que la mayoría de sus compatriotas se declaran satisfechos de su gestión gubernamental. Pero Netanyahu es muy popular en el seno del Likud y apuesta por la intransigencia frente a los palestinos con una postura muy cercana a la extrema derecha nacionalista.
El Likud todavía no ha decidido cómo elegirá a su número uno, candidato al cargo de primer ministro y cabeza de lista para las elecciones legislativas generales de noviembre de 2003.
fTE e.pRESS