Así lo anunció hoy durante una comparecencia ante las autoridades municipales celebrada en el Parlamento israelí (Kneset).
Olmert agregó que en su alocución pública a los habitantes de Gaza les dirá también que son víctimas del extremismo y que sus dirigentes están dispuestos a sacrificar la sangre de su pueblo y negarles la posibilidad de vivir en paz y seguridad, informó la radio pública israelí.
Insistió en que Israel no interrumpirá sus operaciones militares contra los que disparan los cohetes Al-Kasam y que no vacilará en ‘golpear a los responsables del terrorismo’.
Con todo, reconoció que no existen soluciones mágicas al fenómeno de los Al-Kasam y advirtió de que no tiene intenciones de ‘llegar a ningún acuerdo con Hamás o la Yihad Islámica’.
El jefe del Ejecutivo israelí tiene previsto entrevistarse el próximo 7 de junio con el presidente palestino, Mahmud Abás, según anunció este último en una rueda de prensa en Gaza.
Desde que Israel reanudó los ataques aéreos en la franja de Gaza hace dos semanas para impedir el disparo de cohetes contra su territorio, más de 60 palestinos, en su mayoría militantes de facciones armadas, han muerto y decenas resultaron heridos.
Asimismo, dos civiles israelíes perdieron la vida en la localidad de Sderot, situada a pocos kilómetros de la franja palestina por el impacto de cohetes lanzados desde ese territorio.