La milicia chií libanesa Hezbolá ha recibido de contrabando misiles de largo alcance así como misiles antitanque avanzados fabricados en Irán y Siria en los últimos cuatro meses desde que terminó la guerra este verano, según informa hoy el diario israelí ‘Jerusalem Post’.
Según el diario, el Ejército israelí destruyó gran parte de los misiles de largo alcance que tenía Hezbolá, incluidos los de fabricación iraní Fajr y Zelzal, pero nuevos datos de inteligencia
indican que en los últimos cuatro meses Hezbolá ha recibido misiles de corto alcance, antitanque y de largo alcance. En la mayoría de los casos, de acuerdo con esta fuente, los convoyes con las armas atravesaron la frontera con Siria durante la noche.
El gabinete de seguridad israelí decidió ayer elevar el nivel de alerta en el norte del país ante la posibilidad de que las protestas que viene protagonizando Hezbolá puedan derrocar al gobierno del primer ministro libanés, Fuad Siniora. Los servicios de inteligencia militares temen que la milicia pueda utilizar la inestabilidad en Líbano como excusa para lanzar ataques contra Israel no sólo utilizando cohetes Katiusha, sino también misiles antiaéreos contra los aviones israelí que sobrevuelan Líbano.