«Hemos privilegiado el desarrollo tecnológico y trabajamos en la creación de un centro, que funcionará las 24 horas, y cuyo objetivo será identificar a cualquier avión que no tenga una intención amistosa hacia nosotros», declaró. «Este centro, que estará en contacto con el Ejército, comenzará a funcionar en un año», añadió, sin dar más detalles.
El ministro hizo estas declaraciones durante una rueda de prensa sobre «el nivel de preparación de Israel para la amenaza terrorista en la aviación civil, un año después del 11 de septiembre». Según el ministro, las compañías aéreas están sometidas a un control más estrecho y los 70 aeropuertos que tienen enlaces con Israel son regularmente controlados por agentes israelíes, desplegados de forma anónima.
Asimismo reveló que dos empresas israelíes trabajan actualmente en la creación de un sistema de protección contra los disparos de misiles tierra-aire contra aviones civiles.
Por su parte, el jefe de los servicios secretos del Ejército del Aire, el brigadier general Ilan Baram, indicó que no se ha tomado «ninguna medida particular» para mañana. El responsable militar declaró que hay «informaciones concretas sobre un preparative de este tipo de atentado pero sí una alerta global en un cierto número de escenarios».