Itongadol.- Acompañado por familiares y partidarios, Elor Azaria llegó a la base de Tzrifin por haber matado a un atacante palestino que ya estaba neutralizado.
El ex soldado de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) condenado por matar a un palestino herido, Elor Azaria, comenzó hoy su primer día de prisión después de meses de disputas legales para retrasar la sentencia y los pedidos de los legisladores para que lo perdonen.
El abogado de Azaria, Yoram Sheftel, afirmó que hoy era un "día triste" para Israel.
"Este es un día triste para el Estado, para las FDI y para el 90 por ciento de los ciudadanos de Israel. Este es un día de felicidad para el enemigo árabe y por lo tanto este es un día de felicidad para los medios de comunicación israelíes", destacó.
Además de Sheftel, una serie de partidarios se reunieron fuera de la casa de la familia para ver a Azaria, muchos de ellos llevaban camisas con imágenes del ex soldado y expresándole su apoyo con carteles.
Azaria fue conducido a la prisión de la base militar de Tzrifin en el centro de Israel, entre un convoy de coches con banderas con su imagen sobre una bandera israelí.
Conduciendo hacia la prisión, la familia fue escoltada por oficiales de las FDI que intentaron despejar el camino entre la multitud de periodistas. Uno de los hermanos de Azaria empujó a un fotógrafo y gritó: "Vuelve al coche", con su hermana tratando de calmarlo.