Itongadol.- El gobierno chileno protagonizó hoy una nueva polémica con el embajador israelí en el país, Gil Artzyeli, después de que el diplomático cuestionara al presidente Gabriel Boric por sus dichos sobre el conflicto en Medio Oriente.
Ayer Artzyeli llegó hasta La Moneda para sostener una reservada cita con el subsecretario del Ministerio del Interior, Manuel Monsalve. En el encuentro, el representante diplomático expresó su molestia por los dichos de Boric, que en China acusó a Israel de cometer una “barbarie” en la Franja de Gaza con el bombardeo en el hospital Al-Ahli de Gaza, que dejó más de 500 muertos, según las autoridades palestinas.
Tras la reunión, Monsalve salió a cuestionar a Artzyeli y dijo que “ha cometido un error”, porque usó una reunión sobre seguridad en el ministerio del que es titular para manifestar su molestia por los dichos del Boric en su gira por China.
“El embajador sabe que, para entregar opiniones respecto a la posición del gobierno en materia internacional hay otro canal, que es el Ministerio de Relaciones Exteriores, él lo sabe perfectamente”, dijo Monsalve a la prensa, al dejar entrever su malestar.
“Un embajador con experiencia tiene que ser capaz de reconocerlo y rectificar”, agregó.
La polémica comenzó cuando Boric, en su gira por China, dijo que “los atentados inaceptables y brutales perpetrados por Hamas no justifican bajo ningún punto de vista la barbarie que el Estado de Israel está llevando adelante en Gaza”, en referencia a la ofensiva israelí sobre ese territorio tras el ataque del movimiento palestino del 7 de octubre.
Estas declaraciones generaron molestia en el embajador israelí, quien criticó las palabras del mandatario chileno en sus redes, sin nombrarlo, y solicitó una reunión con el Ministerio del Interior.
“Pedí la reunión debido a las crecientes amenazas a la embajada y a la ola de antisemitismo en Chile”, escribió Artzyeli en sus redes sociales. “Como el tema de seguridad interior está intrínsecamente vinculado con la situación en mi país, abordé también este tema, como hago en todas mis reuniones, ante lo que el ministro dejó claro que este asunto corresponde a la Cancillería”, añadió.
Artzyeli ya había protagonizado una situación de tensión con el gobierno chileno, después de que el canciller Alberto van Klaveren afirmara un día después del ataque de Hamas que “el uso de la fuerza contra civiles nunca es aceptable en los conflictos armados, aún en el ejercicio de la legítima defensa”.
Van Klaveren llamó “a todas las partes involucradas” a “respetar ese principio básico”, y remarcó que “eso vale para Hamas, la Jihad islámica, el Estado de Israel y cualquier otro actor que intervenga en el conflicto”.
El embajador israelí replicó entonces que le parecía “muy desafortunado que mientras sigue el ataque que nos costó cientos de vidas de israelíes masacrados, heridos y secuestrados, se ponga en duda el derecho de Israel de defenderse”.
“Israel tiene todo el derecho y la obligación de defenderse”, remarcó el embajador, y subrayó que “mencionar a Israel junto con Hamas y la Jihad islámica, grupos terroristas islámicos apoyados por la dictadura iraní, es lamentable”.
La vocera del gobierno chileno, Camila Vallejo, entró en la polémica y dijo que no equipararon a Israel con Hamas ni se cuestionó el derecho de defensa, sino que se refirieron al derecho de las personas.