Itongadol.- Estados Unidos anunció este lunes nuevas sanciones contra una empresa comercial de software espía dirigida por un ex militar de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF), cuyo programa permitía acceder fácilmente a casi cualquier información almacenada en un smartphone.
Funcionarios estadounidenses e investigadores privados afirmaron que los productos de Intellexa Consortium se utilizaron para campañas de vigilancia masiva en todo el mundo, permitiendo a usuarios sin escrúpulos rastrear y obtener información sensible de disidentes, periodistas, candidatos políticos y figuras de la oposición.
Las penas se dirigen contra cinco personas y una organización relacionadas con Intellexa, una red de empresas con sede en Grecia y filiales en Macedonia del Norte, Hungría, Irlanda y las Islas Vírgenes Británicas.
La empresa desarrolló y vendió un conjunto de herramientas de software espía conocido como Predator, que permitía entrar en el dispositivo de un objetivo sin necesidad de que éste hiciera clic en un enlace o archivo adjunto.
A continuación, el programa daba acceso a la cámara y al micrófono, así como a cualquier dato o archivo almacenado en el teléfono comprometido.
»Estados Unidos no tolerará la propagación imprudente de tecnologías perturbadoras que amenazan nuestra seguridad nacional y socavan la privacidad y las libertades civiles de nuestros ciudadanos», expresó Bradley T. Smith, Subsecretario del Tesoro en funciones para Terrorismo e Inteligencia Financiera.
Varias filiales de Intellexa y dos empleados, entre ellos su fundador, fueron sancionados a principios de este año por la administración Biden. Asimismo, el año pasado el Departamento de Comercio incluyó a Intellexa y a una de sus filiales en una lista negra, negándoles el acceso a la tecnología estadounidense.
Las cinco personas sujetas a las nuevas sanciones ocupaban puestos de responsabilidad en Intellexa o en una de sus filiales, según las autoridades estadounidenses.
Aliada Group, otra subsidiaria con sede en las Islas Vírgenes Británicas, también fue sancionada por acusaciones de permitir transacciones financieras para Intellexa que sumaron decenas de millones de dólares, dijeron las autoridades.
Intellexa fue creada en 2019 por el exmilitar israelí Tal Dilian. Dilian y Sara Hamou, especialistas en deslocalización corporativa que prestaron servicios de gestión a Intellexa, fueron sancionados a principios de este año, en lo que los funcionarios de la administración Biden definieron como la primera vez que se emitían sanciones por el uso indebido de programas espía.