Itongadol/AJN.- La empresa ferroviaria “Trenes de Israel” anunció la interrupción del servicio entre Haifa y Tel Aviv, y entre esta ciudad y el Aerpuerto Ben Gurión, el sábado por la noche y el domingo. Se trata de los días más concurridos de la semana, cuando son principalmente los soldados quienes ocupan los abarrotados vagones, rumbo a las bases militares en todo el país.
El primer ministro Binyamin Netanyahu ordenó, unos minutos antes de que comenzara el descanso sabático, la interrupción de los trabajos de reparación de infraestructura ferroviaria que se realizaba por orden del ministro de Transporte, Israel katz. Katz argumentó que la Policía de Israel presentó un informe según el cual las reparaciones resultan indispensables y urgentes, y de lo contrario los usuarios del tren estarán en peligro.
Pero – de acuerdo con analistas locales – Netanyahu se rindió ante la presión de los partidos ultraortodoxos y ordenó suspender los trabajos durante el descanso sabático. Por ello, los servicios debieron ser suspendidos el sábado por la noche y hoy, domingo, generando una importante crisis de gobierno y la indignada reacción de los ciudadanos.
La mañana del domingo – junto con la tarde del jueves – son los momentos de mayor concentración de público en los trenes en todo el país, sobre todo por la gran cantidad de soldados que se desplazan desde y hacia las bases militares.
Manifestación en pleno corazón de Tel Aviv
Anoche, al menos 400 personas participaron en una manifestación en la ciudad de Tel Aviv debido a la suspensión del servicio de trenes hasta las 19.00 de hoy. La policía detuvo a uno de los manifestantes por alteración del orden. También en la estación Lev Hamifratz, en Haifa, manifestaron unas 100 personas contra la suspensión de los trabajos en Shabat.
Políticos de oposición acusaron abiertamente al primer ministro Binyamin Netanyahu por la situación generada en la disputa de los trenes. Junto a la estación Savidor Merkaz, en pleno centro de la ciudad, unas 400 personas protestaron por la decisión del primer ministro de suspender los trabajos durante el descanso sabático que derivó en la necesidad de interrumpir el servicio de trenes del sábado por la noche y domingo a la mañana entre las estaciones Tel Aviv y Haifa y Tel Aviv-Aeropuerto Ben Gurión. Esta situación provocó grandes filas en las paradas de los autobuses y enormes embotellamientos en varios puntos del país, en especial en Tel Aviv.
La oficina del primer ministro Netanyahu difundió anoche un comunicado en el que expresó que “Esta es una crisis iniciada y promovida por el ministro Israel Katz diseñada para socavar las relaciones entre el primer ministro y el público ultra-ortodoxo o, alternativamente, para dañar la imagen del primer ministro ante el público en general. Desde el principio, no había necesidad de iniciar el trabajo en Shabat. Habría sido posible llevar a cabo el trabajo en otras fechas, en las que no se perjudica a la población ultra ortodoxa a los pasajeros o soldados. Por ejemplo, habría sido posible combinar el trabajo con el cierre de ocho días del ferrocarril – que cuenta con la aprobación del Ministerio de Transporte – en las próximas semanas. Israel Katz mantiene a pasajeros y soldados como rehenes en una crisis innecesaria y artificial que inició después de haber fracasado en su intento de controlar las instituciones del partido Likud. El primer ministro está indignado por el ataque cínico del ministro Katz contra pasajeros en general y contra los soldados y está haciendo todo lo posible para minimizar el daño en las próximas 24 horas. Para este fin, el primer ministro y el ministro de Defensa acordaron colocar autobuses a disposición de los soldados durante las próximas 24 horas y dio instrucciones para reforzar el transporte público entre Haifa y Tel Aviv con autobuses adicionales.
La titular del partido Meretz, Zehava Galon, declaró a Radio Kol Israel durante la manifestación: “Creo que vemos un comportamiento de un primer ministro que literalmente descarriló. Los manifestantes no están dispuestos a pagar el precio político a costa de los soldados, las personas discapacitadas, y en general de todos los que necesitan los servicios del tren. Lo que hacen aquí es cerrar cuentas políticas entre ellos y la gente paga el precio, es inaceptable”.
El titular del Movimiento “Israel Libre”, Shay Even, que organizó la protesta, se dirigió a los ministros Liberman y Kahlon y les pidió que hagan algo. “Precisamente quienes no hablan hoy, y en primer lugar Avigdor Liberman que hace dos meses era representante de la población laica y hoy es ministro de Defensa tienen que hacerse oír. No puede ser que hoy el país se desintegra, el sistema de transporte público no funciona, y ellos guardan silencio”.
Iariv Openheimer, ex titular de la organización Shalom Ajshav: “Estoy aquí como ciudadano enojado. Les recuerdo que esta semana también aumentaron los precios del combustible y ahora estas peleas internas. Aquí hay un gobierno indiferente a los ciudadanos y sus necesidades. Un gobierno que debe pagar el precio e irse”.
Los manifestantes aseguraron que no se trata de una protesta de un día sino de una lucha por el futuro y la esencia del país como estado judío, democrático y libre.
Crisis en el gobierno y en el Likud
El enfrentamiento entre el primer ministro Netanyahu y el ministro Katz provocó fuertes tensiones dentro del partido Likud, al que ambos pertenecen. No está claro cuál será el futuro del ministro Israel Katz, y se habla de la clara posibilidad de que sea despedido por Netanyahu. Si bien dentro del partido nadie se atrevió a contradecir a Netanyahu respecto a la cuestión de los trabajos en el tren, algunos sí le pidieron que no despida a Katz, que calme los ánimos y que el conflicto se resuelva puertas adentro, en el seno del Likud.
El legislador Oren Hazan advirtió sobre el perjuicio que podrían provocar, a futuro, estos enfrentamientos internos. “Llamo a mi amigo, el primer ministro Netanyahu, a calmar los ánimos. El ministro Katz no es el enemigo, todas estas discusiones internas sólo perjudican al partido Likud, perjudicarán al primer ministro, acelerarán las elecciones y el fin de su mandato. No se puede resolver estas diferencias a través de los medios de comunicación”.
En este sentido, los partidos de oposición Meretz, Iesh Atid y el Movimiento Sionista unieron fuerzas – algo poco común – y juntaron las 25 firmas necesarias para convocar a una sesión de emergencia durante el período de receso en la Knesset.
Zehava Galón también presentó un recurso ante la Corte Suprema de Justicia contra la interrupción de los trabajos en la infraestructura del tren durante el descanso sabático.
Una señal de que la crisis es seria y podría tener consecuencias graves la dio el titular de la coalición parlamentaria, el legislador David Bitan, que canceló un viaje que tenía previsto a Estados Unidos y Canadá. Bitan decidió permanecer en Israel e intentar arreglar las cosas.
Mientras tanto, el único que guarda silencio es el ministro Israel Katz.