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Itongadol/AJN.- La Fuerza de Defensa de Israel se mantuvo en alerta y continuó con su gran presencia en el norte del país esta mañana mientras continua la tensa calma luego del ataque mortal de Hezbollah en el que murieron dos soldados.
Terroristas del Líbano atacaron con un misil antitanque a un vehículo de la FDI que viajaba a dos kilómetros de la frontera noreste en el pueblo Ghajar. Otras siete personas resultaron heridas.
Anoche el Canal 10 de Israel informó que días antes del ataque, las tropas de la FDI recibieron una advertencia acerca de que Hezbollah estaba planeando un ataque en el área de Har Dov en el noreste del Estado Judío, informó el medio israelí The Jerusalem Post.
Según un reporte no confirmado, el ejército israelí fue supuestamente informado sobre un escenario acerca de un disparo de proyectil del Líbano. Luego de esta advertencia, se informó que un gran número de tropas se relocalizaron para evitar estar en medio del fuego. A pesar de esto, el convoy de la Brigada Givati que fue golpeado en el ataque había continuado con su patrulla en la frontera noreste.
Según las evaluaciones de largo plazo de la FDI, el ejército israelí y Hezbollah continuarán intercambiando golpes debido a las actividades de la organización terrorista tanto en el Líbano como en Siria. En este último lugar, el intento del grupo por establecer una base terrorista con apoyo iraní desencadenó un ataque aéreo la semana pasada, el cual llevó a la última ronda de violencia.
Importantes funcionarios de la FDI no creen que el intercambio a largo plazo de estos golpes termine, sin contar los ataques de corto plazo.