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Itongadol/AJN.- Israel no dejará de exportar productos agrícolas a Rusia, aunque la Unión Europea haga presión debido a las sanciones contra este país por la crisis de Ucrania, dijo el ministro de Agricultura israelí, Yair Shamir.
Hablando con la agencia de noticias rusa RIA Novosti, Shamir dijo que una de las razones por las que Israel resistiría ante cualquier presión era debido al boicot europeo a las producciones de los asentamientos en Cisjordania.
A fines de julio 28 naciones europeas impusieron sanciones severas contra Rusia debido a lo que Occidente dice que son parte de sus esfuerzos por desestabilizar a Ucrania. Las sanciones apuntan contra los servicios financieros, energéticos y defensivos del país. Una semana después los rusos respondieron frenando todas las importaciones agrícolas de la UE, informó el medio israelí Haaretz.
En entrevistas con medios rusos el 10 de septiembre, Shamir dijo que Israel está interesado en seguir exportando producciones a Rusia, incluso si la presión de la UE cesa. “Primero, no siento ni veo la presión. Tomen en cuenta que últimamente los europeos han estado boicoteando algunos de nuestros productos. Entonces, ¿es así cómo es? ¿Nos ponen un boicot y no ayudamos a nadie más? No pueden. Por un lado, no pueden frenar las ventas israelíes a Europa y, por otro, pedirnos que paremos las exportaciones a Rusia. No van juntas. Tienen que decidir”, destacó.
Shamir describió las sanciones europeas contra Rusia como una oportunidad para Israel y destacó que el Estado Judío está preparado para triplicar sus exportaciones agrícolas al país – de $325 millones a $1 billón por año. “Si vienen y nos dicen que no boicotearán, tal vez podamos negociar. Pero no creo que el gobierno israelí quiera eso”, agregó.
“Incluso si se reducen las sanciones a Rusia creo que nuestros productos seguirán fluyendo allí. Sería más fácil lidiar con nosotros, más barato y más estable, y no habría un precio político por lo que uno hace o no hace”, dijo.
Los comentarios de Shapir aparecieron en el sitio web de la agencia gubernamental rusa en inglés y alcanzaron rápidamente a importantes funcionarios de la UE en Bruselas, quienes hablaron el tema con diplomáticos israelíes.