Itongadol/AJN.- En los días intermedios de la festividad de Sucot, que son semifestivos (Jol Hamoed), el mundo judío festeja Simjat Beit Hashoevá, una antiquísima celebración que se remonta a la época del Beit Hamikdash (Templo de Jerusalem), cuando se vertía agua sobre el sacrificio diario de la Fiesta de las Cabañas, además de la habitual libación de vino.
Durante esa semana, los habitantes de la Ciudad Santa y aquellos que peregrinaban a ella cumpliendo la mitzvá (precepto) de llevar sus ofrendas se congregaban al anochecer en el atrio y bailaban alegremente hasta el amanecer.
De hecho, los jajamim (sabios de la época talmúdica) afirmaron que “aquel que no vio el regocijo de la extracción del agua, nunca vio alegría en su vida”.
Durante las noches de Jol Hamoed se efectuaba un sacrificio adicional y los cohanim (sacerdotes) extraían agua del manantial de Shilóaj (foto), cercano a Jerusalem, y el Cohén Gadol (Sumo Sacerdote) efectuaba el “Nisui Hamaim” (ofrenda de verter las aguas) sobre el Mizbéaj (altar).
Los jajamim consideraban a Shilóaj el manantial de la salvación porque a su lado se ungían los reyes de Israel.
Luego de eso, los sabios del Sanedrín y el resto del pueblo bailaban como expresión de alegría.
En la comunidad judeoargentina, desde hace ya varios años que Jabad Lubavitch organiza una fiesta con espectáculos musicales, otros entretenimientos y puestos de venta de comida, libros y artículos de judaica, que será hoy, lunes, a las 20 hs., en la calle Boulogne Sur Mer, entre Lavalle y Tucumán.
1,6K