El líder supremo iraní, el ayatolá Ali Khamenei, dijo este miércoles que el supuesto plan nuclear de Teherán no iba a cambiar, independientemente de las sanciones internacionales, asesinatos u otras presiones.
"Con la ayuda de Dios, y sin prestar atención a la propaganda, el plan nuclear de Irán debe continuar firme y serio. Las presiones, sanciones y asesinatos no dan frutos. Ningún obstáculo puede detener el trabajo nuclear de Irán", sentenció Khamenei.
El ayatolá hizo estas declaraciones en la televisión estatal poco después de que el organismo de control nuclear de la ONU declarara el colapso de las conversaciones con Irán encaminadas a intentar hacer frente a las sospechas de que Irán encubre una búsqueda de armas nucleares.
La República Islámica niega esto, diciendo que su programa de enriquecimiento de uranio es para combustible nuclear y la energía es utilizada para fines pacíficos solamente.
Pero la negativa de Irán a frenar las sensibles actividades atómicas con fines tanto civiles como militares, y su historial de secretismo y restricciones a las inspecciones de la ONU, han instado a una actitud más dura de las Naciones Unidas, EE.UU y sanciones europeas.
Varios científicos nucleares iraníes han muerto en atentados en los últimos dos años, en los que Teherán ha culpado a Israel. El Estado judío no ha hecho comentarios.
Los Estados Unidos e Israel no han descartado la posibilidad de recurrir a la acción militar contra Irán si llegan a la conclusión de que la diplomacia y las sanciones no detendrán el desarrollo de una ojiva nuclear.
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