Centenares de personas conmemoraron hoy, viernes, el Día Mundial por Darfur en el parque Levinsky del sur de Tel Aviv.
Los participantes vestían camisetas con un mapa de Darfur y portaban pancartas contra el presidente sudanés, Omar al-Bashir, con consignas como “Bashir es un criminal”, “Bashir es un terrorista” y “Zona de exclusión aérea en Darfur”, mientras un grupo de niños pequeños ondeaba banderas del Frente de Liberación de Darfur.
La concentración fue convocada por “Bnei Darfur”, la organización de migrantes darfurianos en Israel, e incluyó un minuto de silencio por las víctimas de los combates en esa región del oeste de Sudán y discursos que describieron la situación en el terreno.
Uno de los gestores del evento, Bahar Eldin-Adam, declaró que el mismo “es muy importante para nosotros, a fin de crear conciencia sobre la situación en Darfur”.
“La última opción es un referéndum para separar a Darfur del resto del país”, admitió el activista, quien aseguró que “queremos que la comunidad internacional haga en Darfur lo que hizo en Libia, una zona de exclusión aérea, porque los helicópteros del gobierno siguen matando gente y muchos pueblos están siendo incendiados”.
Desde que, en febrero de 2003, comenzaron los combates entre grupos rebeldes y tropas gubernamentales y milicias apoyadas por el Estado, entre 150.000 y 400.000 personas han perdido la vida por combates y enfermedades.
Según un informe difundido por la Autoridad de Inmigración de Población y Fronteras, en enero de este año vivían en Israel 8.256 ciudadanos de Darfur y el sur de Sudán.
398