La Administración estadounidense da, según él, un «apoyo
político, militar, económico y financiero a Israel, e intenta justificar sus crímenes bajo el pretexto de que el enemigo sionista está en posición de autodefensa».
Macharka denunció «la guerra de exterminio llevada a cabo por el criminal de guerra Ariel Sharon (primer ministro israelí), quien tiene por objetivo vaciar los territorios ocupados de sus habitantes».
«Las matanzas cometidas hace unos días en Rafá» en el sur de la franja de Gaza y «las enormes destrucciones» posteriores son una «señal evidente de que el terrorista Sharon es un enemigo de la paz y que su Gobierno es un gobierno de guerra», prosiguió Macharka.
El Ejército israelí lleva a cabo desde hace unos diez días operaciones de envergadura en Rafá durante las cuales 15 palestinos murieron y, según la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (Unrwa), 114 casas fueron destruidas dejando a 1.240 personas sin hogar.
Para Macharka, «Israel es el foco de terrorismo más peligroso en el mundo. Es un Estado terrorista el que comete los actos más viles contra los árabes».
El presidente estadounidense, George W. Bush, no quiso denunciar el ataque aéreo israelí llevado a cabo el pasado 5 de octubre en el corazón del territorio sirio y subrayó en dos ocasiones el derecho a la defensa del Estado hebreo.