Itongadol (Por Yaakov Hagoel*/The Jerusalem Post).- Mientras Pésaj se acerca, el aire ya se llena del espíritu de la festividad. Como contexto, nuestra nación continúa luchando en muchos frentes: por el regreso de nuestros hijos e hijas del cautiverio, por restaurar la seguridad del pueblo en Israel y por mantener el estatus de Israel como una nación invencible, una columna de fuego que se alza contra oscuros regímenes de odio y muerte.
En medio de todo esto se nos presenta la Hagadá de Pésaj y, con ella, una frase que resuena en mí de nuevo cada año, especialmente ahora: «En cada generación, uno debe verse como si él mismo hubiera salido de Egipto».
Esa no es una mera declaración espiritual o emocional, sino una directiva, personal, nacional y consciente. Incluso en 2025, 77 años después del establecimiento del Estado de Israel, en un país soberano, con gobierno y ejército propios, con una antigua lengua revivida y en un pueblo que ha regresado a su patria, aún seguimos en un viaje no menos complejo, desafiante ni valiente.
El viaje que comenzó con el Éxodo no terminó con la entrada inmediata a la tierra. Cruzamos desiertos. Sobrevivimos a la persecución y a intentos de aniquilación. Luchamos contra las dudas, enfrentamos guerras y sufrimos pérdidas. Eso es parte de lo que significa pasar de la esclavitud a la libertad. Incluso hoy seguimos en el proceso. Hemos experimentado el Éxodo, pero el viaje aún no ha terminado. Solo un poco más. Ya casi estamos allí.
«En cada generación se alzan contra nosotros para destruirnos.»
A ochenta años de la liberación de Auschwitz, y una vez más, el antisemitismo asoma su fea cara. No en las sombras, sino a plena luz del día. En los campus, en las calles y en las redes sociales. En medio de una batalla por nuestra identidad, por la rectitud de nuestro camino y por nuestra propia existencia debemos recordar: el viaje aún no ha terminado. Y la responsabilidad es nuestra.
Pésaj, el Día del Recuerdo de la Shoá, el Día de la Recordación de los Soldados Caídos de Israel, el Día de la Independencia y el Día de Jerusalem no son solo fechas nacionales o conmemorativas. Son momentos decisivos para nuestra identidad. Son momentos en los que debemos preguntarnos: ¿Seremos una generación que construye sobre el renacimiento o una que simplemente recuerda? ¿Podemos combinar memoria y humildad con orgullo y propósito mientras forjamos nuestro destino compartido?
En las Instituciones Nacionales -esos organismos que sentaron las bases del Estado y continúan defendiendo los valores y la misión del sionismo- participan representantes judíos de todo el mundo. Ahora, durante las elecciones para el 39º Congreso Sionista, veo una chispa de esperanza. Veo a judíos de todos los orígenes -religiosos y laicos, sefaradíes y ashkenazíes, jóvenes y mayores- eligiendo pertenecer, eligiendo influir, eligiendo actuar.
Las elecciones que se están realizando ahora en los Estados Unidos son una oportunidad única para todo judío preocupado: cinco minutos, cinco dólares y cinco años de sionismo práctico, de valores, acción, identidad y conexión con nuestra herencia y nuestro pueblo.
ZOA, uniendo pasado y futuro
Como presidente de la Organización Sionista Mundial y representante de la Coalición ZOA (Lista 15) en el Congreso, creo que cada voz es ahora un eslabón de una cadena que comenzó con el Éxodo, continuó con la aliá a Israel, atravesó los pogroms, la Shoá y el renacimiento, y continúa hoy con la configuración del futuro judío.
ZOA (sigla en inglés de la Organización Sionista de los Estados Unidos) no es solo una lista, es una misión. Une el pasado y el futuro, la identidad y la acción. Se encuentra en el centro de los valores judíos y sionistas: la Tierra de Israel, la Diáspora judía, una postura firme contra el antisemitismo y una reafirmación de la unidad, la aliá y la integridad de nuestra tierra.
El pueblo eterno no le teme a un viaje largo.
Aun así, en cada generación estamos llamados a vernos como si nosotros mismos estuviéramos saliendo de Egipto. Es exigente. Es desafiante. Y es posible, si tan solo nos mantenemos unidos, si elegimos ser socios, si asumimos la responsabilidad.
Pueblo. Herencia. Tierra. Futuro.
* Presidente de la Organización Sionista Mundial.