Itongadol.- El presidente de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), Amos Linetzky, pronunció este jueves un discurso en el acto central del 30° aniversario del atentado en el que advirtió: «No fueron suficientes las decenas de mujeres mutiladas y vejadas frente a las cámaras, para que las agrupaciones feministas extiendan su sororidad cuando se trata de mujeres judías’’.
El titular de la AMIA señaló que ‘‘quizás la consigna de que el cuerpo de la mujer no debe ser un campo de batalla, o las tan nombradas ‘Te creo hermana’ o ‘Ni una menos’, tengan una letra chica que no leímos y dice ‘salvo que seas judía’’’.
«Parece que no fueron suficientes las imágenes grabadas por los propios asesinos, las violaciones y decapitaciones transmitidas en vivo y en directo, los cuerpos calcinados de jóvenes y ancianos», agregó.
Linetzky también se refirió a la falta de condena a nivel internacional, afirmando: ‘‘No vamos a olvidar ni a perdonar a las personas, organismos internacionales, organizaciones y movimientos sociales que dieron vuelta la cara, callaron o hasta apoyaron la barbarie terrorista’’.
Con respecto a los rehenes que permanecen cautivos en la Franja de Gaza desde el 7 de octubre, criticó: ‘’‘No fueron suficientes los niños asesinados o que quedaron huérfanos, para que Unicef muestre algo de dignidad y algún mínimo grado de preocupación. ¿Dónde está UNICEF reclamando por la devolución con vida de los hermanitos Bibas?’’.
‘‘No fueron suficientes los armamentos encontrados en oficinas de organismos humanitarios supuestamente creados para ayuda internacional, como ocurrió con la agencia de la ONU y la confirmada participación de varios de sus integrantes en los ataques, no fueron suficientes los gritos desesperados de familiares para que la Cruz Roja pueda llevar medicamentos a personas secuestradas que necesitaban tratamientos, una Cruz Roja con tanta experticia histórica en la falta de compromiso, una Cruz Roja que no visitaba los campos de exterminio nazi o lo hacía evitando preguntar por las cámaras de gas y crematorios, emitiendo luego informes que no describían el horror, siempre mirando para otro lado’’, concluyó el presidente de la AMIA.