Itongadol.- Purim es en Israel el equivalente a Halloween en otros países. Aparecen los disfraces, los niños que se visten para ir al colegio y se consumen caramelos y galletas. Pero a su vez la festividad tiene un costado no tan alegre.
Purim es la historia de una venganza, Esther y Mordechai salvaron al pueblo judío del intento de exterminación a manos de Haman.
Con el correr de los años muchos se han tomado la historia de manera literal. Existieron reportes de ataques violentos contra árabes en Purim cometidos por judíos y a su vez, también, ataques de palestinos sobre judíos.
El evento más recordado ocurrió en 1994 cuando Baruch Goldstein asesinó a 29 palestinos en la cueva de los patriarcas en Hebron.
Este año, para celebrar Purim los niños se disfrazan como Elor Azaria, un soldado que mató a un sospechoso palestino. Muchos israelíes lo vieron como un héroe injustamente castigado por proteger a su nación.
Finalmente, en un intento por propagar la paz y promover la educación intercultural entre judíos y árabes en Israel, el presidente, Reuven Rivlin, cantó una canción en el evento de esta semana para honrar a Jehan Jaber, una profesora árabe que enseña hebreo a sus alumnos a través de la música.