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Itongadol/AJN.- En el partido que lidera Yitzjak Hertzog, el Movimiento Sionista, desmintieron las declaraciones según las cuales la investigación policial sobre los fondos en la última campaña para elecciones primarias frenó el proceso de formación de un gobierno de unidad nacional.
Fue el ministro de Hacienda y titular del partido Kulanu, Moshe Kahlon, quien aseguró que “hubo contactos para la entrada de Hertzog al gobierno y esto (la investigación) frenó el proceso. No sé si estaban a un paso o tres de concretarse. Pero hoy, según como yo veo la política israelí, todas estas complicaciones no sucederían si tuviéramos un gobierno de mayoría amplia, con menos divisiones y enfrentamientos, con más consensos nacionales y nos ahorraríamos muchos conflictos. La investigación que involucra a Hertzog frustró el ingreso del Movimiento Sionista al gobierno. El único partido con potencial para sumarse a esta coalición, a mi entender, es el de Hertzog”.
En el entorno de Hertzog rápidamente desmintieron estas declaraciones y aseguraron que Kahlon repite estos dichos al menos desde hace un año y envía siempre los mismos mensajes, pero nunca acompañados por algún paso concreto.
Fuentes del Movimiento Sionista citadas por Radio Kol Israel aseguraron que hubo y hay diferentes intermediarios que representan a la coalición de gobierno y otros que en nombre propio que intentaron e intentan la formación del gobierno amplio. De todos modos, lo que impide que el partido de Hertzog entre a este gobierno – dicen sus allegados – es la falta de acuerdo en asuntos de política exterior y de seguridad.
La legisladora Sheli Yejimovich, del Movimiento Sionista, declaró a Kol Israel, que las declaraciones sobre este tema son desproporcionadas. “Decir que había un proceso avanzado de contactos que se frenaron por las investigaciones a Hertzog, creo que es una exageración. Hay que recordar que nuestro partido no puede estar en una coalición con racistas como Betzalel Smotrich (legislador del partido Habait Haiehudi) o quienes quieren destruir el poder judicial. Si se formara un gobierno de unidad con dos partidos grandes con líneas fundamentales comunes y una agenda democrática, social y económica, no me negaría en forma automática. Pero la situación de hoy no es ésa”.
De todos modos, los contactos – incluso si fueron mínimos – quedaron congelados por el momento y las posibilidades de que se forme un gobierno de unidad nacional se ven cada vez más lejanas.