Itongadol/AJN.- La investigación de Náutica Mundial, ente rector de este deporte, confirmó la denuncia de la asociación israelí y lamentó “profundamente” que los windsurfistas Yoav Omer y Noy Drihan (foto) “no pudieran competir en el Mundial Juvenil debido a las condiciones impuestas por las autoridades malayas”, que “violaron el artículo 7 de la constitución” del organismo, según informó ayer, miércoles, en un comunicado.
El presidente del ente hebreo, Gili Amir, precisó a medios de su país que los organizadores les negaron las visas a los atletas y a su entrenador, Meir Yaniv, prohibieron que los deportistas desfilaran con la bandera de su país o utilizaran símbolos nacionales en sus atuendos y tablas y anticiparon que si alguno de ellos ganaba el torneo, su himno Hatikva no se escucharía.
De ese modo, Omer y Drihan no pudieron defender en Langkawi sus títulos Sub-19, y Sub-17 y Sub-19, respectivamente.
“El tardío comienzo del proceso para permitirles participar a los velistas israelíes, los retrasos y la pobre comunicación de todas las partes durante el mismo y la morosa notificación de las condiciones contribuyó al resultado e hizo imposible a Náutica Mundial y el COI (Comité Olímpico Internacional) resolver el incidente antes del campeonato”, se excusó la entidad.
“Todos los torneos de Náutica Mundial involucran un elemento de representación de países y en todas sus regatas deben ser expuestas las banderas e interpretados los himnos de los ganadores”, sentenció.
El Comité Ejecutivo se reunió extraordinariamente el viernes, en Londres, para debatir los “inaceptables sucesos en el recién concluido Mundial Juvenil” y tras una investigación a fondo, con la total cooperación del COI, decidió que “en el futuro se les requerirá a los organizadores (federaciones nacionales y regionales, clases internacionales, etc.) de toda competencia náutica cumplir con condiciones específicas para asegurar que los competidores de todos los países puedan participar por igual”.
“Si éstas no son satisfechas, se aplicarán sanciones específicas respecto de futuras competiciones náuticas internacionales que se lleven a cabo en ese país”, agregó la entidad, que anticipó que esta semana publicaría detalles adicionales, tal como ocurrió.
Las mismas podrían implicar no volver a elegir a ese país como sede de un certamen internacional, la negativa a designar oficiales que controlen carreras allí y/o la cancelación de su membresía.
En tanto, el ministro de Juventud y Deportes malayo, Khairy Jamaluddin, explicó a un medio local que la decisión seguía “la política del gobierno”, que no tiene relaciones diplomáticas con Israel.
En virtud de ello, el presidente de la entidad internacional, Carlo Croce, emitió la semana pasada el siguiente comunicado:
“Náutica Mundial espera que se les permita a los velistas de todas las naciones competir en igualdad de condiciones. Esta expectativa queda en claro en el proceso de licitación y figura en la documentación contractual que rige nuestros eventos”.